Ven dificultades para permisos a mujeres por licencia menstrual

Ingrid Verónica Baños Guerrero, sexóloga y activista feminista, consideró que la reforma “es un gran avance para los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y personas menstruantes en el estado”

Alejandro Reyes y Elizabeth Hernández
Pachuca; Hidalgo /

Activistas y funcionarias estatales destacaron la aprobación de dos días de permiso con goce de sueldo cada mes a las mujeres con problemas en su ciclo menstrual, sin embargo, puntualizaron que el tema podría ser complicado en cuanto a la atención y comprobación en las instancias de salud así como su aplicación.

Esto tras la reforma a la Ley de los Trabajadores al Servicio de los Gobiernos Estatal y Municipales así como de los Organismos Descentralizados del Estado de Hidalgo aprobada por los legisladores, la cual de acuerdo con la Secretaría de Servicios Legislativos del Congreso del estado está por turnarse al Poder Ejecutivo para su publicación en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo (POEH).

“Es un avance importante”, sostuvo Ana Lara Vargas, directora de la Colectiva Mujeres contra la Violencia, aunque consideró que será complicado y complejo que las mujeres demuestren en las instancias de salud que padecen dismenorrea primaria o secundaria.

Durante el ciclo menstrual se pueden presentar una serie de síntomas, entre ellos se encuentran dolores pélvicos o abdominales a lo que se denomina dismenorrea, la cual se define técnicamente como el dolor antes o durante la menstruación de tipo cólico en la porción inferior del abdomen presente durante al menos tres ciclos menstruales, cuya evolución clínica varía entre cuatro horas hasta cuatro días y se clasifica en dismenorrea primaria y secundaria.

Se considera que la dismenorrea primaria es más común que se presente antes de los 20 años, ocurre en ausencia de una causa identificable, es decir, dolor sin patología pélvica con un inicio en los primeros seis meses después del primer periodo menstrual.

Mientras que la dismenorrea secundaria se trata de las mismas características clínicas del dolor durante la menstruación, pero es atribuible a patologías subyacentes como endometriosis, fibromas, adenomiosis y anomalías anatómicas congénitas.

Por su parte, Ingrid Verónica Baños Guerrero, sexóloga y activista feminista, consideró que la reforma “es un gran avance para los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y personas menstruantes en el estado”.

Sin embargo, enfatizó que hay un área de oportunidad en el hecho de que no todas las mujeres y personas menstruantes tienen acceso a un especialista en el área de ginecología que pudiera brindar el diagnóstico porque la cobertura en temas de salud, dijo, muchas veces se queda en el primer nivel de atención.


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