En noviembre de 2018, un bot llamado Tobi produjo casi 40 mil artículos de prensa sobre los resultados de las elecciones en Suiza para el gigante de medios Tamedia en tan solo cinco minutos.
Tobi, un generador automático de texto, escribió sobre los resultados de cada uno de los 2 mil 222 municipios de ese país, en francés y alemán, según un análisis presentado el mes pasado en la conferencia Computation + Journalism, realizada en Miami.
Este tipo de programas dotados de inteligencia artificial, disponibles desde hace unos 10 años, se vuelven cada vez más comunes en los grandes medios.
“Vemos que el potencial de la inteligencia artificial o el robot-periodista es cada vez más aceptado en las salas de redacción de todo el mundo”, dijo Damian Radcliffe, profesor de la Universidad de Oregon, EU.
PARA TAREAS MONÓTONAS
Mientras el sector lucha cada vez más para mantenerse a flote, los medios han comenzado a mirar hacia la inteligencia artificial para producir artículos, personalizar la entrega de información y, en algunos casos, clasificar datos.
Para estas organizaciones, los bots no apuntan a reemplazar a reporteros o editores, sino a ayudarlos a deshacerse de las tareas más monótonas, como resultados deportivos y de empresas.
The Washington Post, por ejemplo, se ha apoyado en un programa llamado Heliograf para cubrir más de 500 elecciones desde 2014.
Según Jeremy Gilbert, un responsable del diario estadunidense, el bot puede dar resultados más rápido y actualizar artículos a medida que la información cambia, lo que permite a los periodistas enfocarse en otras tareas. Además, las reacciones en la redacción han sido positivas.
¿AYUDA O AMENAZA?
Las mismas preguntas flotan en otras redacciones del mundo. La agencia de noticias noruega NTB automatizó los informes deportivos para que los resultados de los partidos salgan en 30 segundos.
Los Angeles Times, por su parte, desarrolló un quakebot, un bot especializado en terremotos que publica rápidamente artículos sobre los sismos en la región.
La agencia Associated Press automatizó resultados de empresas para cerca de 3 mil compañías, mientras que el diario francés Le Monde, y su socio Syllabs, utilizó un programa que generó 150 mil páginas de internet cubriendo 36 mil municipios durante las elecciones de 2015.
Aunque profesionales de los medios reconocen las limitaciones de estos programas, también señalan que a veces logran lo que los humanos no pueden hacer.
Atlanta Journal-Constitution utiliza un equipo de periodismo de datos para desvelar 450 casos de médicos que han sido remitidos a juntas o tribunales por mala conducta sexual, casi la mitad de los cuales todavía tienen permitido ejercer.
El diario utilizó el machine learning o aprendizaje automático, una herramienta de inteligencia artificial, para analizar cada caso. Después, este trabajo fue revisado por reporteros.
Pese a que parecen ayudar, hay preocupación sobre la evolución del oficio. Algunos temen que la inteligencia artificial desemboque en recortes de empleos.
Meredith Broussard, profesora de periodismo en la Universidad de Nueva York, no ve peligro inmediato en la inteligencia artificial: los programas se ocupan de los artículos “aburridos… algunos trabajos serán automatizados, no me preocupa”, concluyó.
Y ADEMÁS
UN NUEVO ESTILO DE HACER MÚSICA
Puede que nunca llenen estadios para un concierto de rock, pero las computadoras ya son capaces de componer música de manera convincente, como se demostró en el festival South by Southwest (SXSW), en Texas, EU. Se produjo un disco entero con la ayuda de la inteligencia artificial, algo sin precedente.