Autoridades confirmaron que el ejemplar, una hembra de entre tres y cinco meses, murió por causas naturales.

La agencia de conservación del país dijo el lunes que se cree que una criatura varada este mes en una playa de la Isla Sur era una ballena picuda de Bahamonde, también llamada zifio de Travers.

Las autoridades locales y organismos como Profepa y Conapesca han sido notificados para tomar medidas.

La manada de ballenas piloto quedó atrapada en la playa Traigh Mhor al ser arrastrada por la corriente; científicos teorizan que una de ellas quedó varada y el resto la siguió.

Los pobladores trataron de regresarla al mar, pero no fue posible debido al peso y tamaño del cetáceo.

Walter Nájera, alcalde de Sipacate, comentó que ya se indaga cuál pudo ser la causa de muerte del cetáceo.

Este tipo de eventos ocurre principalmente por el cambio de temperatura del mar, explicó el biólogo Eduardo López Noriega.

Personal de la Oficina de Representación de Protección Ambiental acudieron al sitio ante el llamado de los pescadores de la zona y comprobaron que se trata de un ballena jorobada.

Una ballena en peligro de extinción apareció muerta el fin de semana en San Francisco, California. Es la quinta ballena que muere en condiciones similares durante el último mes.

Una ballena gris de casi ocho metros llegó a la Playa Dockweiler, en Los Ángeles, donde falleció poco después.