En los últimos años, las estafas telefónicas dirigidas a adultos mayores se han vuelto más frecuentes, y lamentablemente, esta tendencia ha impactado a Marie Marshall de manera devastadora.
A sus 66 años, Marie, descrita por familiares y amigos por su espíritu luchador y quien siempre pone a los demás antes que a ella misma, ahora ha sufrido una estafa que ha dejado una marca dolorosa en sus ahorros de toda la vida y en sus aspiraciones de jubilación.
Aunque había estado anhelando un retiro tranquilo, una simple llamada telefónica a principios de este año cambió su vida de manera trágica.
La voz al otro lado afirmaba ser del departamento de fraude del Commonwealth Bank, y esta falsa confianza resultó en la pérdida de sus ahorros.
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Así estafaron a una mujer de la tercera edad por teléfono
Marie Marshall, una mujer australiana de 66 años, fue víctima de una estafa telefónica que ha dejado un rastro de devastación en sus ahorros.
La voz en el teléfono, con acento indio y hablando claramente en inglés, afirmó ser del departamento de fraude del Commonwealth Bank, relató para el medio News.com.au
“Me informó que había una serie de transacciones sospechosas en mi cuenta y Commonwealth creía que mi cuenta había sido comprometida... Para asegurar mis cuentas y fondos, dijo que tendría que abrir una nueva cuenta CBA y transferir todo mi dinero allí”, contó para el medio.
El estafador logró citar los números de cuenta y los saldos de Marie, lo que le otorgó una apariencia de legitimidad. Alegó que su cuenta estaba comprometida debido a transacciones irregulares y le aconsejó abrir una nueva cuenta para transferir sus fondos.
Para dar un aspecto más auténtico, el estafador insistió en que confirmara su identidad a través de una aplicación. El hombre al teléfono argumentó que esta era una medida más segura que brindar detalles por teléfono, ya que eso era lo que hacían los estafadores.
Sin embargo, al descargar la aplicación, el estafador obtuvo acceso total al teléfono de Marie y saqueó sus ahorros, aproximadamente 13 mil 392 dólares, los cuales resultaron ser los ahorros totales de Marshall.
Su banco no la respaldó ante la estafa
Aunque algunos de los fondos pudieron ser recuperados mediante una cuenta bancaria de Westpac, la mayoría permanece desaparecida. Marie se encontró con tan solo dos dólares en su cartera.
Desafortunadamente, las consecuencias de la estafa continúan ya que el estafador utilizó su tarjeta de crédito y el Commonwealth Bank sigue cobrando tarifas en esa cuenta.
Marie no se percató del fraude hasta dos días después, cuando leyó una publicación en Facebook de alguien que experimentó la misma estafa.
“Leí una publicación en Facebook sobre alguien que experimentó exactamente la misma estafa. Inmediatamente me eché a llorar e intenté acceder a mi cuenta bancaria, pero no pude iniciar sesión”, reveló.
El impacto fue devastador y dejó a Marie angustiada y desconsolada. Su familia la apoyó mientras presentaba una queja en el Commonwealth Bank y buscaba respuestas.
Después de una investigación, el banco informó a Marie que los fondos no eran recuperables. Paradójicamente, a pesar de haber sido robada, el banco la obliga a devolver el dinero que el estafador gastó, junto con las tarifas en su tarjeta de crédito.
La compensación ofrecida por el banco se ve ensombrecida por esta situación, dejando a Marie con un futuro incierto y económico.
“He ahorrado durante tantos años y he trabajado tan duro, y ahora todo eso se ha ido y probablemente no sea recuperable. “Estaba tan avergonzada y me sentí tan estúpida por caer en la estafa. Siempre había sido muy cuidadosa con el dinero”, agregó.
Esta terrible experiencia ha impactado profundamente la salud mental y el bienestar de Marie, quien lucha contra la depresión y la tristeza.
“Mi futuro va a ser una situación de vida semana a semana”, dijo.
A raíz de esto, los seres queridos de Marie crearon una página en GoFundMe con el propósito de brindar apoyo durante este momento complicado. Hasta el momento, esta iniciativa ha logrado reunir más de 4 mil 500 dólares en contribuciones solidarias.