Los delfines suelen ser adorables... hasta que quieren tener sexo contigo. Eso fue lo que sucedió en Landévennec, un pueblo costero de Bretaña, Francia.
De acuerdo con The Telegraph, autoridades locales ya se vieron forzadas a prohibir nadar en la playa porque un delfín en celo ha estado asustando a turistas y lugareños acercándose a ellos y tratando de frotarse contra ellos.
El medio informa que el delfín incluso trató de evitar que varios nadadores salieran del agua, además de intentar frotarse con kayaks y otras embarcaciones pequeñas, en un claro estado de excitación sexual.
Apodado por los lugareños como Zafar, el delfín de tres metros de largo ha dado vueltas por la bahía de Brest durante meses, tiempo durante el cual había entretenido a turistas, hasta ahora que comenzó a causar problemas.
"La natación y el buceo están prohibidos en la costa de la aldea... siempre que se confirme la presencia del delfín", informó el alcalde de Landévennec, Roger Lars, en un comunicado. "Acercarse a menos de 50 metros del delfín también está prohibido".
De acuerdo con France3, la prohibición sólo duró una semana pues Zafar nadó hacia otras aguas.
Un experto dijo al periódico Ouest-France que el cambio en el comportamiento del delfín se debe a que está en celo, pues estos cetáceos no tienen una época particular del año para reproducirse y pueden aparearse en cualquier momento.
Los delfines, agregó el especialista, tienen relaciones sexuales con fines recreativos y, en ocasiones, pueden tener comportamientos sexuales hacia otras especies, incluidos los humanos.
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