Kayla, una orca de 30 años murió ayer en el parque acuático de SeaWorld en Orlando, luego de una enfermedad, dijeron funcionarios de la compañía.
La causa de la muerte no se conocerá hasta que se realice un examen post mortem, según SeaWorld.
Kayla comenzó a mostrar signos enfermedad el sábado, y los veterinarios comenzaron a tratarla basándose en lo que encontraron en un examen físico. Su condición empeoró el domingo y recibió atención las 24 horas del día hasta su muerte.
Estuvo entre las últimas orcas en el parque de Orlando de SeaWorld, así como en los parques de California y Texas.
SeaWorld anunció el fin de su programa de reproducción en marzo de 2016, luego de años de presiones por parte de las protestas por los derechos de los animales y el cambio en la opinión pública acerca de las orcas en cautiverio.
Las protestas se intensificaron después del lanzamiento del documental Blackfish de 2013, que se centró en la vida de Tilikum, una orca responsable del asesinato de la entrenadora Dawn Brancheau cuando la arrastró a un estanque frente a visitantes impactados en 2010.
La película implicaba que las ballenas asesinas se vuelven más agresivas en cautiverio.
A SeaWorld le quedan 20 orcas en sus parques. Hay cinco en Orlando, cinco en San Antonio y 10 en San Diego.
El grupo de derechos de los animales PETA dijo que sus miembros en Florida planeaban realizar dos protestas esta semana en el exterior del parque de SeaWorld en Orlando para conmemorar a Kayla.
"Si bien reconocemos que es demasiado tarde para ayudarla, no es demasiado tarde para llamar la atención sobre los otros prisioneros orcas de SeaWorld, que deben ser liberados en los santuarios costeros tan pronto como sea posible", dijo PETA en un comunicado.
JOS