Los tatuajes ya son parte del cotidiano y es que cada vez son vistos con mayor naturalidad, incluso se considera como discriminación no contratar o negar la entrada a negocios a aquellas personas que los porten, aunque un hombre fue despedido por ésta razón.
Se trata de un hombre francés que impartía clases a niños en un preescolar y es que Sylvain Hélaine perdió su fuente de ingresos por el aspecto que lleva, a pesar de que esto se tratara de un acto discriminatorio.
Al parecer los padres de familia se reunieron para pedir la salida del catedrático, pues aseguraban que el hombre era una mala influencia para los niños pues su aspecto causaba miedo entre el alumnado y todo terminó con el despido de Hélaine.
Además al profesor le prohibieron dar clases a éste sector pues aseguraban que su aspecto desataba -además de polémica y curiosidad- fuertes pesadillas y terror entre la comunidad estudiantil de kínder.
Amante de las cátedras
El maestro Sylvain Hélaine tiene tatuado el cuerpo completo, incluso palmas de las manos y ojos, por lo que su apariencia sale totalmente de lo convencional, sin embargo, es una persona apasionada de su vocación.
En alguna ocasión refirió en entrevista con un medio francés que dar clases era su mayor pasión, pero buscó en la fotografía y moda un ingreso extra valiéndose de su peculiar imagen, la cual terminó por dar fin a su trabajo de planta.
Ahora en redes 'revivieron' su caso y volvieron a viralizarlo, aunque no hay mayores detalles sobre su actual situación en sus redes sociales hay actividad sobre proyectos fotográficos basados todavía en cómo luce, lo cual probablemente sea su actual fuente de ingresos.
KVS