Aria Hill, una niña de seis años, murió en Estados Unidos tras haber sido golpeada por una pelota de golf que fue lanzada por su padre en medio de un juego.
De acuerdo con medios locales, la menor estaba sentada dentro de un carrito en el campo de golf llamado Links al Sleepy Ridge en al oeste de Estados Unidos, cuando la pelota la golpeó en la cabeza.
La niña fue trasladada en helicóptero al hospital general Trent Colledg y posteriormente a un centro asistencial para niños; sin embargo, el golpe provocó daños irreversibles que provocaron su muerte poco tiempo después.
El teniente de la policía Trent Colledge explicó que el carrito no estaba colocado delante del jugador de golf, sino en un ángulo entre 45 y 90 grados, por lo que se trató de un accidente y no se presentarán cargos en contra del padre.
David Smith, tío de la menor, aseguró a Fox News que padre e hija solían pasar tiempo juntos en el campo de golf, ya que era la actividad favorita de ambos.
Riesgos de una pelota de golf
De acuerdo con un estudio publicado por el forense español Carlos Guerrero, una bola de golf puede alcanzar velocidades de hasta 300 kilómetros por hora, por lo que el objeto puede causar la muerte en caso de golpear determinadas zonas del cuerpo
"La velocidad que se le impere tiene una correlación con el efecto que puede provocar un arma de fuego, y en determinadas ocasiones, hay palos que pueden provocar que la bola tenga más velocidad que la bala que sale de una pistola", dijo Carlos Guerrero a la agencia EFE.
DIGL