Poppy es una tierna perrita bulldog francés de siete años que sobrevivió a una enfermedad crónica que debilitó sus patas traseras, y luego al ataque de un perro donde perdió un ojo. Hoy, Poppy camina con ayuda de una silla de ruedas y se recupera gracias al amor y cuidados de su dueña.
Gillain Currie, de 28 años, ha cuidado de Poppy desde que sufrió una enfermedad llamada IVDD, o enfermedad del disco intravertebral.
Pero, por fortuna, Poppy cuenta incondicionalmente con ella. Gillain que se encarga de que no se pierda ninguna de sus sesiones de fisioterapia, ni sus paseos al aire libre.
En estas imágenes grabadas por Gillian se puede ver a la perrita Poppy disfrutando de paseos por la playa o el parque en San Francisco, California.
Los vídeos de Poppy disfrutando de una buena vida se han hecho virales en Internet con cientos de miles de visitas, inspirando a quienes creen que un mundo mejor es posible para los animales discapacitados.
evr