En 2007, un hombre llamado Sherif Girgis tenía tan sólo 23 años y ganó 17 millones de libras esterlinas (372 millones de pesos mexicanos) en la lotería de Australia.
Al no saber cómo invertir su dinero, pidió ayuda y el empresario que encontró lo instó a invertir en un bar, un yate de alquiler de lujo, un club nocturno y también un terreno con vistas al mar.
Como resultado, sus negocios tuvieron pérdidas por más de 1.5 millones de libras esterlinas en tres años, por lo que recientemente decidió demandar al empresario Russell Poliwka, a quien conoció en el Gran Premio de Melbourne en 2012 y lo lo asesoró para sus compras.
Como resultado, logró recuperar 1.1 millones al considerar las autoridades que lo influyó para hacer la inversión.
Pero incluso, ese proceso fue tedioso, pues la demanda contra el empresario de bienes raíces con una empresa valuada en 160 millones dólares australianos (mil 873 millones de pesos medicamos) comenzó en 2014 y apenas se resolvió en 2019 con el fallo en favor del ganador de la lotería.
Según reportan medios australianos, en 2012 cuando se conocieron, Girgis únicamente contaba con lo equivalente a 58.5 millones de pesos mexicanos, de los casi 400 que había ganado en años anteriores.
Curiosamente, en tierras británicas han ocurrido otros casos extraños en torno a la lotería. Martyn y Kay Tott del Reino Unido ganaron la lotería este año pero no cobraron su boleto ganador, dado que no lo hallaron en los próximos 30 días a la fecha del sorteo.
caov