A los 13 años, Óscar Sánchez descubrió los bailes sonideros y le pareció curioso que la gente “se arrimaba para los saludos”, aunque él no se acercaba porque “había un buen de cholos y me daba miedo”.
Pero cuando el joven perdió el temor, se dejó llevar por la música, sobre todo de Charly, el sonido preferido de su colonia. En ese entonces, no imaginaba que se iba a convertir en un referente de la escena sonidera no solo de su barrio, sino de León, bajo el mote de Sonido Cremas.
Tampoco previó que iba a descubrir al que en la actualidad es el bailarín más popular en redes sociales: José Eduardo, mejor conocido como Medio Metro.
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“Toda mi familia ha trabajado en la obra, yo fui el único que me dediqué a esto del sonido”, cuenta Óscar en entrevista vía Zoom con MILENIO.
Desde su natal León, el joven asegura que lo suyo es “hacer bailar a mucha gente, no solo a dos o tres parejas, y hay mucha gente que no baila, pero le gusta ambientarse, y a esos me gusta hacerlos gritar. Cuando los veo ambientados, me ambiento más”.
Su primera tocada tuvo lugar en un terreno de la colonia 10 de mayo y la recuerda muy bien porque al terminar el evento “se pelearon bien feo; ahí estábamos adentro del lugar y unos chavos querían tumbar el portón”.
De sus andanzas en el barrio conoció a José Eduardo, quien en ese entonces iba en la primaria.
"Cuando él salió de la primaria, va su mamá y me dice ‘Quiere que seas su padrino, va a salir de la primaria’. Yo me escondía porque se me hacía bien chistoso, pero mi mamá me dijo ‘Te está buscando, hazle el favor’. Dije ‘Va’, nos acomodamos, fui su padrino y ese día su familia le organizó su fiesta", recuerda Óscar.
A partir de ese momento, ambos se volvieron muy amigos, al grado que el bailarín nunca faltaba a las presentaciones de Sonido Cremas. “Era curioso porque donde quiera que llegábamos todos los niños querían jugar con él, y no les hacía caso, los traía atrás como chiveadillo”.
Óscar asegura que José “siempre ha traído el don de bailar”, pues desde adolescente “lo poníamos a bailar con las muchachas, le decíamos ‘Te vamos a discutir un refresco’. A él siempre le ha gustado”.
Del origen del peculiar apodo de su camarada, el artista comenta que previamente le decían El duende o Pachuquito, hasta que alguien le dijo Medio Metro, “y así se le fue quedando”.
"Ha batallado mucho, por eso me da gusto que sobresalga. Ha pasado por muchas cosas, le hacían mucho bullying por su tamaño", señala Sánchez.
El momento en que comenzó el camino ascendente de José es un recuerdo fresco en la memoria de Óscar: el youtuber Richard TV, en su búsqueda de sonideros en León, dio con su proyecto, Cremas, y lo contactó para grabar una entrevista.
Tras la charla, Richard le hizo una petición: “Ocupo grabarte tocando”. El sonidero aceptó, pero le pidió que esperara un poco “en lo que llega un chaparrito”.
“Medio Metro no llegaba porque estaba echando reja con su novia, entonces le hablo a un chavo ‘¿Dónde está Medio Metro?’. El punto es que después llega Medio Metro en moto y lo ve Richard, y hasta como que le brillaron los ojos porque se veía curioso”.
Al poco tiempo, en un evento donde tocó Óscar, Julián Ramírez, responsable de Sonido Pirata, vio a José y quedó fascinado con su presencia, por eso le propuso trabajo. Pero antes de aceptar, el bailarín consultó a su amigo y padrino, quien lo incitó a seguir creciendo.
"Los que no lo conocen, hablan cosas que no, porque siempre le ha gustado el ambiente sonidero, y no solo cumbia, él baila cualquier tipo de género", dice el responsable de Sonido Cremas sobre Medio Metro.
Por último, Óscar Sánchez, que entre sus metas musicales con Sonido Cremas tiene la de salir a más ciudades del país, dice que se mantiene en contacto con José Eduardo, quien hace poco le contó su sentir ante la fama: "Me dice: ‘Ahorita no sé si estoy dormido o estoy soñando, no sé qué está pasando, ando en la calle y la gente se me deja ir’".
hc