Las buenas acciones, cuando se registran en fotos o videos y se comparten en redes sociales, tienden a volverse virales, ejemplo de esto es el hombre que apoyó con dinero a un heladero que estaba trabajando bajo la lluvia o los jóvenes que se cooperaron para respaldar a uno de sus compañeros de aula que no atravesaba un buen momento económico.
Ahora en Perú un repartidor cobró notoriedad en TikTok porque luego de que un cliente rechazó su pedido de comida, el trabajador decidió no desperdiciar los alimentos y se los regaló a un hombre en situación de calle.
- Te recomendamos Joven se hace viral por broma en dónde la basura se lleva su moto: "Mis cajas de pizza no se las llevan" Virales
“Me acaba de caer un pedido y el señor nunca salió. Es de madrugada, es más de la una, y al señor lo estuve esperando como 30 minutos y nunca salió. ¿Adivinen que voy a hacer con su comida?”, dijo el trabajador al principio del video que compartió en su cuenta en la red social, @bad_jeims.
En la grabación, se ve al joven primero mostrando el paquete de comida que el cliente rechazó y luego entregándole la comida a un hombre en situación de calle que adaptó varias cajas y plásticos como ‘hogar’ en plena banqueta.
Asimismo, en la descripción del clip, que al momento acumula más de 100 mil visualizaciones, el repartidor explicó la situación a detalle.
“Siendo las 12:47 am me cae el último pedido ya para retirarme a mi casa a descansar, el pedido lo tenía que recoger en San Isidro y llevarlo hasta Victoria, me dio un poco te temor por la hora y la zona. Llegué a la 1:10 am al domicilio del cliente, le escribí al chat del aplicativo y no respondía, le llamé como 23 veces y no respondía, toqué el timbre muchas veces y tampoco respondía”, detalló el joven.
Tras 30 minutos de espera, se contactó con el soporte de Rappi “y me pidieron que aguarde diez minutos más a lo que ellos se comunicaban con el cliente. Ya habían pasado 40 minutos, eran ya las 2 am y me dijeron que tenía que devolver el pedido mañana o de lo contrario tendría que pagarlo… pero qué estupidez devolver mañana cuando es comida y la comida se malogra”.
Entonces, el repartidor recordó que “en La Cesta, ubicada en avenida Las torres San Luis, vivían dos abuelitos, señores de la tercera edad los cuales dormían en una pequeña choza. A pesar de no tener nada ni siquiera una camita donde dormir, los señores son muy aseados, en el canal de separadora ellos se asean y lavan su poca ropita que tienen”.
“Tal vez no es mucho, pero sé que con lo que les compartí Dios me bendice con salud y trabajo, espero que con este video llegue a tocar sus corazones y puedan regalarles alguna frutita o comidita o ropita, ellos son muy educados y lo recibirán”, concluyó @bad_jeims.
hc