Jesús Morales, un hombre de 24 años del sur de California, no dejó que la pandemia le evitara ayudar a los demás. Sus conmovedores videos de TikTok en los que regala dinero a los vendedores callejeros de Los Ángeles y San Diego se han hecho virales y hasta el momento ha podido distribuir más de 90 mil dólares.
Morales trabajaba en un gimnasio, pero fue despedido en 2020, al inicio de la pandemia. Fue entonces cuando decidió crear contenido original para TikTok bajo el nombre @Juixxe. Comenzó con algunos videos divertidos y ganó muchos seguidores, pero sentía que algo le faltaba.
Inspirado por otros creadores que usaban la plataforma para buenas causas, como dejar grandes propinas o hacer donaciones, el joven se dispuso a pedir el apoyo de sus seguidores para hacer el bien.
“Hice un video pidiendo donaciones para ayudar a las personas sin hogar”, contó Morales a CalMatters.
Para su sorpresa, funcionó. Varios usuarios le mandaron dinero y él lo usó para comprar comida y agua para los individuos sin techo de su área. Fue así como se le ocurrió destinar futuros apoyos a su comunidad: los migrantes latinos.
“Mi papá tenía varios trabajos y mi mamá era mesera y me decía que a veces la gente le daba una propina de centavos”, dijo Morales sobre sus padres, migrantes mexicanos que lo inspiraron a ayudar a personas trabajadoras en sus luchas diarias.
Ahora el trabajo de @Juixxe en TikTok se centra en recolectar las donaciones de sus seguidores, que van desde pocos hasta miles de dólares, y una o dos veces por semana buscar vendedores ambulantes de herencia latina a quienes dárselas. Generalmente le da a los vendedores fajos de miles de dólares y ellos quedan impactados y conmovidos.
Hasta el momento el joven ha repartido más de 90 mil dólares y cuenta que él no se queda nada de las donaciones, sino que vive de sus colaboraciones con diversas marcas y de la venta de su propia mercancía.
La única desventaja que Morales le ve a su labor es que maleantes podrían identificar a los vendedores a los que ayuda para intentar robarles así que se espera varios días o incluso semanas para compartir los videos en sus redes sociales. Es también por eso que nunca muestra los rostros de las personas.
“Odiaría que cualquier vendedor ambulante fuera atacado y robado”, concluyó.
pmm