En el corto plazo, el Sistema Educativo de México debe reincorporar a alrededor de 763,299 niñas, niños, adolescentes y jóvenes (NNAJ) inscritos en el ciclo escolar 2019-2020, que no continuaron en el ciclo 2020-2021 por causa de la pandemia por covid-19, advierte una estimación publicada por el Área de Apoyo y Seguimiento a la Mejora Continua e Innovación Educativa.
Dependiente de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, menciona que la organización deja claro que la reducción representa una baja de 2.5% de la matrícula, especialmente en niveles preescolar y media superior.
Al profundizar sobre los principales desafíos de la educación en México en 2022, refiere que entre las responsabilidades del Sistema Educativo Nacional (SEN), está la de ofrecer educación obligatoria, desde la etapa inicial hasta la media superior.
A través del Boletín Educación en Movimiento, establece que se debe mejorar la asistencia a la escuela de 3 a 17 años de edad, toda vez que según el Censo de Población 2020, 5.7 millones de niñas, niños, adolescentes y jóvenes se encontraban fuera de la escuela, es decir, nunca habían asistido a ella o truncaron sus estudios por motivos diversos.
La desafiliación en secundaria, es otro asunto por atender. El área educativa aporta estadísticas que indican la pérdida educativa de 308,923 adolescentes, y en educación media superior de 683,544. "Casi un millón de estudiantes ingresaron al ciclo escolar 2018-2019, pero no lo concluyeron", cita textualmente
Revela también que mejorar infraestructura y servicios en las escuelas es otro tema pendiente. En 2020, por ejemplo, 23,679 escuelas primarias de educación indígena, secundaria y primaria comunitaria, y telesecundarias, carecían de agua potable.
Entre los retos educativos del país resalta la necesidad de crear estrategias para disminuir el número de personas que no saben leer ni escribir. Servicios de alfabetización para cerca de 4.5 millones de personas –la mayoría adultas mayores–; que representan 4.8% del total de la población de 15 años y más.
Incrementar docentes de especialidades en las escuelas y mejorar la formación continua de docentes, es otro desafío. En el país, 18 de cada 100 docentes de educación básica carecen de título de licenciatura.