Para la construcción de grandes edificios y asegurarse de que los materiales usados en ellos son lo suficientemente resistentes para soportar el peso de maquinas, aparatos electrónicos y personas que se encuentren presentes en él, existe la carrera de Ingeniería Civil, la cual ve la construcción, haciéndola eficiente y segura para todos.
Sin embargo, no solo pueden construir edificios ni dedicarse exclusivamente a este rubro, por lo que María Fernanda Vargas Ramos, estudiante de tercer semestre en la Universidad La Salle Laguna y Valeria García Armendariz, egresada de la Facultad de Ingeniería Civil y Arquitectura (FICA) de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED) nos comparten su experiencia en la carrera.
María Fernanda menciona que ella escogió la carrera debido a que en preparatoria se puso a analizar cuáles eran sus virtudes y aptitudes para poder escoger una buena licenciatura para ella. Gracias a ello, concluyó en que sus áreas fuertes eran las materias de matemáticas, cálculo, entre otras, por lo que sus maestros le sugirieron una ingeniería.
Viendo todas las ingenierías que las universidades de Torreón, Gómez Palacio y Ciudad Lerdo ofrecen, tuvo que ponerse a investigar sobre ellas y descubrió que la Ingeniería Civil era la que le llamaba la atención por todas su aplicaciones en la vida cotidiana.
En cuestión de expectativas, Vargas Ramos antes de entrar a la carrera pensaba que solamente verían cosas relacionadas a la construcción que fuesen básicas de aprender. Sin embargo, ahora que se encuentra dentro de ella comenta que no solo se ve cómo pegar un ladrillo, por ejemplo, sino que deben hacer los cálculos y previsiones para que no haya problemas en la estructura a la hora de colocar ese ladrillo, tipos de materiales, incluso la estética para las construcciones.
Entre las áreas que ha visto María Fernanda en su carrera se encuentra estructuras, infraestructura, el proceso de materiales, la resistencia de los mismos. También puede entrar al área del laboratorio, el proceso de construcción de casa-habitación, al igual que cálculos. Por el momento, el área que le interesa es el proceso de construcción casa-habitación, pero en específico el área de cálculos para la resistencia del mismo inmueble.
Considerando que es una carrera compleja por todos los cálculos anteriormente mencionados, no es una carrera sencilla, pero sí es un área esencial e interesante para las personas que les llama la atención el mundo de la construcción, por lo que la recomienda bastante estudiarla y tener en cuenta de que, si es algo que te gusta, por muy pesada que pueda ser, le echarás ganas.
MUJERES EN INGENIERÍA
Valeria confiesa que el descubrir que le gustaba esta carrera fue difícil, ya que en preparatoria no tenía del todo definido qué era a lo que se quería dedicar. “Yo solo sabía que me gustaban los números y siempre se me dieron bien materias como cálculo, matemáticas, pero siento que eso abarca muchas carreras todavía”, menciona recordando su camino.
Al tener un tío que estudió Ingeniería Civil, decidió acercarse con él para conocer esta carrera, lo cual le empezó a llamarle la atención. Considera que esta carrera se puede abarcar en todas las zonas, sean estas urbanas o rurales. Además, al ser mujer, le parecía aún más retador cursarla, ya que es de las ingenierías que es considerada “de hombres” regularmente, por lo que quiso demostrar que esta no solo son para ellos, sino que las mujeres pueden también.
Al hablar sobre las expectativas antes de entrar la carrera, García Armendariz menciona que esperaba conocer mucho sobre la misma. A pesar de que considera que esto sí pasó, su mayor sorpresa al cursarla fue que terminó enamorada de la ingeniería, cosa que no había pasado antes de entrar. “Si me encontraba emocionada, pero no era algo que se me hiciera sorprendente, pero ya al estar en clases, me di cuenta de que es todo un mundo lo que abarca y me gustó mucho”.
Poco antes de terminar la carrera, empezó a trabajar como residente de obra en unas casas residenciales. Sus funciones eran supervisar las obras, contratistas, percances, etcétera. Para la misma constructora, supervisó la remodelación de una tienda de autoservicio y poco después le ofrecieron estar en el departamento de compras, donde se encuentra actualmente.
Comenta que sus empleadores consideraron que era óptimo que se encontrara en el área de compras un ingeniero civil porque al comunicarse con los otros ingenieros, podría hablar desde su conocimiento en materiales y al igual que sus rendimientos, entre otras cosas. Argumenta que se encuentra feliz en su trabajo y que ha aprendido mucho más de materiales, al igual que ve el progreso de las obras, lo que es muy bonito para ella.
Como consejo para los jóvenes que les interesa esta carrera, los alienta a cursarla, que le echen muchas ganas y, sobretodo, que no se encierren en un libro, ya que observando las construcciones es como se aprenden muchas cosas, además de que la considera una ingeniería más práctica que teórica. Como dice, considera es de esas licenciaturas en las que es necesario “hacer colmillo”.
Igualmente aconseja que no se cierren a las posibilidades que la carrera les presenta, ya que considera todas son bonitas, y al conocer sus distintas áreas laborales, pueden aprender muchas cosas que les van a servir. Por ello, recomienda que sean abiertos a las posibilidades para aprender, tanto de oficina como en obra, y ya el tiempo dirá en qué se especializarán.