Los embarazos en adolescentes aumentaron por lo menos 30% en México a raíz de la pandemia. El total de partos de madres adolescentes en 2021 fue de 373,661, es decir más de mil por día. Lo más alarmante fue el registro de 8,876 nacimientos de madres menores de 14 años, muchos de ellos producto de violencia sexual derivada del confinamiento, estas duras cifras fueron aportadas por la secretaria general del Consejo Nacional de Población Gabriela Rodríguez Ramírez, apenas en abril de 2022.
Durante el lanzamiento de un proyecto piloto para la prevención de embarazos adolescentes en la Alcaldía Xochimilco, se ofrecieron estadísticas alarmantes sobre maternidad e infancia. En la Ciudad de México, se registraron 261 embarazos de niñas menores de 14 años; 80% de estos nacimientos se concentraron en tres alcaldías: Cuajimalpa, Milpa Alta y Xochimilco.
Por ello, el organismo de las Naciones Unidas dedicado a la salud sexual y reproductiva (UNEPA) dedicado a lograr un mundo en el que todos los embarazos sean deseados, todos los nacimientos sean seguros y el potencial de todas las personas jóvenes sea aprovechado, entre otros fines, miró hacia México y en coordinación con el CONAPO y el IMJUVE enlazaron esfuerzos para prevenir el embarazo en menores de edad.
La alta tasa de embarazo adolescente coloca a México en primer lugar en ocurrencia de embarazos en mujeres de 15 a 19 años dentro de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que en 2019 registraron una tasa promedio de 13.7 nacimientos por cada 1 000 mujeres de 15 a 19 años. Según INEGI, en el país en el trienio 2006-2008 la tasa de embarazo adolescente era de 70.9 por cada 1 000 mujeres de 15 a 19 años; para 2011-2013 se incrementó a 77.0 nacimientos y en el trienio 2015-2017 fue de 70.6 nacimientos.
La maternidad a muy temprana edad conlleva riesgos sobre la salud de la madre pero además reduce oportunidades educativas en las mujeres, lo que a su vez desencadena dificultades para la obtención de un empleo y las expone a sufrir violencia por parte de sus parejas al ser vulnerables ante una mayor dependencia.