El estrés académico se da cuando el estudiante se ve sometido a una serie de tareas obligatorias dentro del contexto escolar, ya sea por parte del maestro o de sus compañeros, lo que genera miedo e incertidumbre excesiva hacia un futuro a corto plazo incierto en el que no pueda cumplir las expectativas propias y de otros, así lo define María Elena López, maestra en Educación.
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"Se pueden presentar diferentes niveles de estrés dependiendo del panorama, como un maestro enérgico o que le pidan al estudiante participar, todo eso les genera angustia y el aceleramiento del corazón en los primeros semestres. Conforme van avanzando, las tareas y la excesiva carga de trabajo también va generando estrés".
López comenta que es a nivel profesional o universitario cuando los estudiantes comienzan a presentar el incremento del estrés académico, debido al cambio de responsabilidades que van adquiriendo, sin embargo, suele generarse también en alumnos de secundaria o preparatoria.
"Va dependiendo de las responsabilidades, cuando entran a la universidad les genera estrés el no saber cómo les va a ir, por saber si les va a gustar la carrera o si van a poder con el trabajo, por eso en los primeros semestres debe haber un refuerzo hacia a los estudiantes por parte de los maestros, hacerlos sentirse seguros de sí mismos, ya que ellos deben saber que están ahí para aprender y para echar a perder si así lo requieren".
Algunas de las consecuencias que desencadena el estrés académico al que se someten los estudiantes se proyecta en malestares físicos y emocionales visibles a simple vista, pues se refleja en ellos un cambio de ánimo y dolores en diferentes partes del cuerpo, especialmente en la cabeza.
"En su salud les repercute y emocionalmente es una carga que lleva a pensar al alumno que no va a poder cuando siempre ha podido, lo que a su vez, trasciende a sus relaciones personales con su familia y sus amigos porque su estado de ánimo cambia".
Para combatir el estrés, López recomienda a los estudiantes acudir con el psicólogo de su escuela o con un maestro de confianza al que le puedan manifestar sus sentimientos y liberar la carga que los sobreabunda.