Septiembre es el Mes de Prevención del Suicidio, un tema que, aunque difícil de tratar en ocasiones, es necesario para ayudar a adolescentes y jóvenes a cuidar su salud mental, por lo que las instituciones educativas y familias deben estar al tanto de los comportamientos de los chicos, buscando en todo momento preservar su integridad.
La maestra Cecilia Martínez, directora del Centro de Integración Juvenil (CIJ) de Torreón, comenta que hablar sobre este tema es pertinente pues es la segunda causa de muerte en personas de 15 a 29 años de edad, siendo un problema de salud pública, además de que en Torreón el problema cada vez crece más.
"Estos últimos cinco años, Coahuila ha estado en los primeros cinco lugares con un problema serio en este tema y recién somos de los primeros que ya tenemos una ley para la prevención del suicidio", declara
Señala Martínez que este documento enfatiza la obligación que tienen las dependencias tanto de salud como educativas para detectar a tiempo los casos, dando información a todas las esferas de la sociedad para el cuidado de la salud mental. Además, indica el hecho de que toda persona que llegue a un centro de salud solicitando atención urgente de este ámbito debe ser atendida, resguardarla y darle seguimiento.
¿Cuáles son las principales causas?
Indica Cecilia que hay diversos factores de riesgo que atender en estos casos, entre ellos hay factores heredo-familiares, antecedente de parientes que fallecieron a causa del suicidio, trastornos psiquiátricos no detectados a tiempo o problemas mentales, entre otros.
"La mayoría de los suicidios van a ser planeados, es decir, van dando señales o avisos que la mayoría de las personas que no tienen herramientas para detectar pueden pasarlos por desapercibidos", comenta.
También comenta, si bien hay muchos factores que orillan a tomar esta decisión, la mayoría de las personas que cometen este acto tienen que ver con su resolución de conflictos, pues muchas de las veces que se presentan estos pensamientos tienen que ver con que no encuentra la manera de afrontar el dolor emocional que la situación le implica. "La persona con intentos suicidas no quiere morir en sí mismo, el objetivo central es eliminar el dolor emocional".
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¿Cuáles son las señales?
Indica que es de suma importancia que padres de familia y escuelas observen a los adolescentes, pues cosas como cambios radicales y repentinos de humor, conductas autodestructivas, el uso de ropa no adecuada al clima para ocultar las marcas de estas acciones, el aislamiento, bajo rendimiento escolar, dificultad en expresar sus emociones o desmotivación en escuela o trabajo.
También en redes sociales suelen encontrarse señales evidentes de un problema grave en cuanto a salud mental. Por ello se hace el llamado también a amigos cercanos a la persona a que, si ve en el perfil publicaciones de despedida o a regalar cosas, se actúe de inmediato. El abuso de sustancias también es común en los jóvenes con idealizaciones suicidas, por lo que vigilar esto es importante.
Por ello, invita a los padres de familia a que se acerquen a las dependencias de salud a solicitar ayuda. "Centro de Integración tiene una plataforma que se llama Team Madres-Padres en Facebook y proporciona constantemente servicios de orientación. Los papás debemos estar adelante para hacer detecciones a tiempo".
A los maestros les sugiere que sigan ayudando en la labor de observación y detección de conductas de riesgo en adolescentes para orientarlos a centros de salud que los puedan ayudar. En cuanto a los jóvenes los incita a pedir ayuda y a los amigos les pide no ser cómplices y avisen a padres de familia o maestros sobre estos pensamientos suicidas. "El buen amigo es el que sensibiliza, levanta la mano, el que cuida".
Finaliza dando a saber que los jóvenes tienen personas que les pueden ayudar y orientar, como es el CIJ para atenderlos y ayudarlos a afrontar los problemas emocionales que tengan.