El Instituto Tecnológico de Torreón (ITT), el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y la Universidad Autónomade Chapingo, se unieron para trabajar en un proyecto sobre aspectos ambientales y sus implicaciones en el manejo de los recursos naturales.
Dichas instituciones han establecido algunas áreas de trabajo en campo, en las que se busca generar información a partir de diferentes experimentos, como el monitoreo de la temperatura basado en imágenes de satélite con apoyo de estaciones meteorológicas.
"Estamos tratando de desarrollar una metodología que nos permita hacer un monitoreo permanente de la humedad en el suelo y la temperatura, estas dos variables son sumamente importantes en la observación de los recursos naturales", dice Armando López Santos, profesor investigador de la Universidad de Chapingo.
Por su parte, Selene Yuridia Márquez Guerrero, profesor investigador del ITT y quien imparte cátedra en la Maestría en Ciencias en Suelos y en el doctorado en Ciencias en Agua y Suelo, afirma que, la idea es formar un grupo multidisciplinario en el que expertos valoren las amenazas ambientales de los ecosistemas, principalmente en lo que es el suelo.
"Aunado a eso, nuestros programas de estudio están correlacionados con el desarrollo de ciencia de paquetes tecnológicos que nos ayuden a identificar problemas que son causantes de estrés ambiental, el recurso suelo es limitado es vulnerable".
López Santos, señala que el INIFAB coincide con los dos programas de posgrado con el apoyo de algunos de sus investigadores con cátedras y colaboran con lo que manejan en los campos experimentales, ayudando con información.
"Con el objetivo de establecer un área de monitoreo permanente de la dinámica de los ecosistemas terrestres en la región, se está cubriendo cerca de 65% del territorio en la Comarca Lagunera, con eso creemos podemos generar información permanente, incluso generar alertas tempranas en el tema de la sequía, lo cual es prioridad y está relacionado con los problemas de la escases de agua, las islas de calor y las especies endémicas que se ven amenazadas".
Resalta que la tendencia hacia la aridización va en aumento, hay estudios que dicen que se ha incrementado en los últimos 20 años, 15%, "quiere decir que las zonas áridas tienen una tendencia a hacerse más áridas, y eso significa pérdida de valor ambiental. El agua se está convirtiendo en la piedra angular de la problemática y con el esfuerzo que estamos haciendo creemos podemos detectar áreas críticas que podrían estar en una tendencia de peligro", dice el experto en el área de suelos y cambio climático.
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Selene advierte que algo muy importante dentro del ciclo hidrológico es la desertificación, que amenaza con la captación del recurso agua, por lo que uno de los proyectos que también se tienen en el área de posgrados sobre todo en doctorado, es tener escenarios al año 2050-2070 en situaciones normales y, "hasta en escenarios catastróficos con especies que son adaptables y conllevan en zonas áridas y semiáridas".
Dentro de las preocupaciones que hay a nivel país, afirma Armando López, son los efectos de la sequía, "en los últimos años las presas han estado en bajos niveles, hay mortalidad del ganado porque no hay comida y agua y eso representa un gran reto para administrar mejor los recursos naturales", concluyó.