Los felinos están conquistando cada vez a más familias y esto no es casualidad: al ser animales más independientes y tranquilos, resultan buena compañía para los integrantes de la casa. Sin embargo, eso no quiere decir que no requieran cuidados especiales o maneras de prevenir que contraigan enfermedades.
Por eso, te queremos dar algunas recomendaciones para cuidar a tu peludo y esponjoso amigo, las cuales se pueden clasificar en cuatro grandes aspectos:
Nutrición: Se puede elegir entre alimentos secos o húmedos, pero deben ir conforme a su edad y estado fisiológico (cría, gestación, lactancia, madurez). Se les debe dejar comida todo el día y en un espacio que sea de fácil acceso para él, además libre de insectos o roedores. En cuanto a la bebida, se les coloca agua en otro recipiente limpio, aunque en ocasiones prefieren tomar de corrientes en movimiento.
Vacunación: Esta es, junto a la desparasitación, indispensable para los felinos y debe seguir todas las indicaciones de los veterinarios. Los gatos adultos deben vacunarse anualmente de enfermedades respiratorias, la leucemia felina y la rabia, y desparasitarse 4 veces al año.
Aseo: El cepillar constantemente a tu gato ayudará a que no se le generen bolas de pelo por la acicalación que hacen para mantenerse aseados. Es recomendable que se realice de dos a tres veces por semana para evitar que se formen tricobezoares (tumor generado por pelos y otros materiales). No es necesario bañarlos constantemente, pero de hacerlo puedes usar un shampoo especial para el animal, aunque no son muy amigos del agua.
Inodoro: Debes de contar con una bandeja con arena para gato en el que pueda hacer sus necesidades, la cual deberá limpiarse diariamente porque no les gusta usarla sucia.