En la actualidad, el aumento de la obesidad en el mundo genera una gran preocupación, pues existen diversos estudios que señalan que esta condición puede afectar la salud física y mental de las personas, por lo que la prevención y tratamiento de la misma es crucial para el cuidado de la salud integral.
Uno de los datos que arroja The Lancet, revista médica con sede en Reino Unido, es que hay más de mil millones de personas se encuentran en este estado desde 2022, una cifra que se ha duplicado entre los adultos y cuadruplicado entre los jóvenes de 5 a 19 años desde 1990.
Igualmente, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), menciona que la obesidad aumenta el riesgo de muchas enfermedades no transmisibles, entre ellas las cardiovasculares, la diabetes de tipo 2 y las enfermedades respiratorias crónicas. Se considera una causa de al menos 13 tipos diferentes de cáncer.
El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), añade que se estima que en el mundo, para el año 2035 habrá cuatro mil millones de personas con este problema y en la población infantil podría duplicarse. En México, 36.9 por ciento de personas adultas vive con esa condición, y en 2030 podría llegar a 45 por ciento, por lo que se busca aumentar la concientización sobre el problema, fomentar la abogacía y compartir experiencias.
Igualmente, comparten que 12 por ciento de los menores de cinco años presenta desnutrición y uno de los principales conductores de la alimentación inadecuada es la sobreproducción de productos ultraprocesados y disminución de alimentos frescos como cereales integrales, leguminosas, verduras y frutas; así como la rápida urbanización y cambios en estilos de vida.
La Sociedad Mexicana de Obesidad señala que, en el caso de las infancias, la obesidad casi se ha duplicado cada 10 años. Eso puede afectarles en la salud física, el bienestar social, emocional y autoestima de los niños, al igual que se asocia con un bajo rendimiento académico y una menor calidad de vida.
Al ser una condición que persiste hasta edad adulta, la prevención y el tratamiento son vitales para detener su aumento global, no obstante, también señala que la obesidad se origina por variedad de factores, incluyendo biología, salud mental, riesgos genéticos, medio ambientales, planes médicos y acceso a comidas altamente procesadas.