Cuando se habla de orientaciones sexuales, es común escuchar dos tipos: la heterosexual, personas que se sienten atraídas a personas del sexo opuesto y la homosexualidad, personas que sienten atracción por el mismo género. Pero, ¿qué pasa si se descubre que te gustan ambos o personas que se identifican con géneros fuera de la norma?
Andrea Huerta Macías, licenciada en Psicología enfocada a niños y adolescentes, menciona que la polisexualidad es una orientación sexual de personas que sienten atracción sexual, emocional, estética y/o romántica de personas de dos o más géneros. Es decir, las personas dentro que se identifican con esta orientación, pueden sentir amor o atracción por su mismo género, opuesto o con otra identidad.
Considera importante aclarar que en este tipo de orientación no necesariamente sienten esta atracción con diversos géneros al mismo tiempo ni con la misma intensidad. “Les pueden gustar personas de diferentes géneros, pero no necesariamente son polígamos, sino que en algún momento de su vida pueden sentir algo por esas personas”.
Entre los mitos que se encuentran en personas dentro de la polisexualidad, señala que el más común es la invalidación de esta orientación sexual, ya que con anterioridad se creía inexistente. Sin embargo, declara que no es que antes no existiera, sino que estos sentimientos se reprimían, debido a que era inaceptable, tanto la expresión de género como la orientación sexual e identidad de género.
Igualmente, es común que se diga que estas personas que se identifican dentro de la polisexualidad son promiscuas, pero esto no necesariamente es así, ya que las personas tienen su manera de ver las relaciones y cada una tiene valores diferentes. Así como pueden haber personas polígamas en relaciones heterosexuales, también una persona polisexual puede ser monógama.
Entre las recomendaciones que da Andrea Huerta para los adolescentes que se identifican dentro de esta orientación, indica que es importante que, de tener dudas, vayan con alguna persona que tenga conocimiento sobre el tema, especialmente de orientación sexual e identidad de género, para así poder entablar una identidad y después descubrir de mejor manera su orientación.
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Sin embargo, si es un primer contacto con este tema, su mayor consejo es que, si causa en el adolescente ansiedad o frustración, no etiquetarse con ninguna orientación. “Realmente, esa etapa es un descubrir del mundo. A veces pasa que de repente van experimentando para descubrirse. Es un proceso muy íntimo e individual”.
Ya que la orientación sexual y la identidad de género es un concepto muy amplio, se puede encontrar bastante información, por lo que hay que verificar fuentes, ya sea para tu propio descubrimiento o para ayudar a otra persona que esté pasando por esas dudas. El acompañamiento de una red de apoyo informada puede ayudar a que el proceso sea menos solitario y frustrante.
Por último espera que las personas se den la oportunidad de conocer diversas realidades en cuanto a este tema, pues para Huerta Macías es ilógico pensar que, habiendo tanta diversidad humana, solo haya espacio para un tipo de atracción. “Hay un espectro muy amplio de oportunidades y sería bueno que la gente se diera la oportunidad de conocerlo".