Redactar correctamente es una obligación de todos, "se supone que debemos aspirar a comunicarnos con aseo por escrito en cualquier espacio o soporte que tengamos a la mano", considera el escritor Jaime Muñoz Vargas, coordinador del Centro de Difusión Editorial de la Universidad Iberoamericana Torreón.
Muñoz Vargas también encargado del Taller de Periodismo y Literatura en la Ibero, manifiesta que los jóvenes que han tenido la oportunidad de cursar una carrera universitaria tienen la responsabilidad de escribir bien.
"Dado que en el futuro gran parte de su trabajo se va a relacionar con la comunicación escrita, formal e informal, como a través de las redes sociales, un profesionista se ve mal ante sus lectores, su familia o amigos si tiene faltas de ortografía o si no redacta con claridad y no es pulcro a la hora de expresarse por escrito".
Explica que los jóvenes universitarios, futuros profesionistas y los profesionistas, deben aprender a manejarse en dos espacios distintos a la hora de comunicarse por escrito. "Antes de las redes sociales y el uso del sistema de abreviatura por imágenes, no existían los emojis o emoticones, entonces había alguna posibilidad de abreviar, en lugar de poner doctor era Dr., o en vez de usted Ud, forma que compartíamos prácticamente todos en la comunicación habitual".
Al llegar las redes sociales y con ellas los emoticones se puede transmitir un sentimiento o una emoción con una sola imagen, "uno puede estar de acuerdo en una comunicación inmediata relacionada con las redes sociales, porque es parte de la comunicación habitual de todos, se inventaron para ser eficaces, rápidas y poder responder de forma inmediata. Pero, tenemos que aprender esa doble faceta, la de comunicarnos de una manera eficaz y rápida, pero también la que es la más formal. Yo no puedo escribir una tesis o artículo periodístico con caritas felices o manitas".
Finalmente recalca que, "es importante que la persona esté consciente que redactar correctamente es importante y va hablar mucho mejor de él como profesional un texto bien escrito que uno mal escrito, es la mejor carta de presentación de los jóvenes".