La canción de Luis Miguel, "Culpable o no", hizo brillar el nuevo estadio de los Diablos Rojos del México, la cual entonaron miles de aficionados durante el juego contra los Padres de San Diego.
En cuanto se escuchó el éxito del Sol de México, los espectadores encendieron las luces de sus celulares para iluminar cada rincón del 'nuevo infierno' y así cantar al unísono este sencillo que nuevamente se hizo famosa tras la serie de la vida del cantante mexicano.
No es la primera vez que la afición escarlata pone ambiente al estadio con esta canción, ya que anteriormente fue un éxito que sonaba en las bocinas del Fray Nano.