Observaciones
En más de treinta años sacando demonios de cuerpos humanos, jamás me había topado con un caso de posesión colectiva, así que realicé un exorcismo de grupo. Esto fue lo que pasó.
Ernesto Cordero
Al mostrarle un crucifijo, el rock star tomó una guitarra eléctrica e hizo una interpretación personal de "Paranoid", de Black Sabbath: “Yo soy un orate pero Ricky Anaya lo está más, solo quiere enriquecer a los Barreiro y nada más”.
Con muchos esfuerzos pude expulsar al Diablo de su cuerpo (y del PAN).
Felipe Calderón
Al arrojarle agua bendita, gritó: “¡Esto no es bacachá!” Luego señaló al rock star y dijo: “¡Cordero del Diablo que traes el pecado del mundo, traicionas a tu candidato, pero estoy de acuerdo contigo porque amo la traición!”. Con la Oración de la Serenidad se alivianó y humildemente se convirtió en aguador del Tri (sin ponerle piquete al agua).
Ricardo Anaya
Después de un lavado de cabeza en la pila bautismal, rió demencialmente y dijo: “¡Lavado, más lavado!”, luego, con voz cavernosa, aulló: “¡Pejeová a la hoguera! ¡Pactó con el PRI!”. Cayó desmayado y el Maligno salió de su cuerpo al leerle el Salmo 150 (tomado de 150 Propuestas de Salmos).
Jefe Diego
Al mostrarle un poderoso talismán tallado en diamante, adoptó una actitud jovial, amable y dulce; con voz aniñada, expresó: “Pejeová es un ejemplo, ¡pactó con el PRI!” Mediante un tráfico de influencias espirituales, se salvó.
Vicente Fox
Después de hablar dos idiomas (priísta y panista) se le quiso sacar a Lucifer, pero el demonio exclamó: “¿Y yo porqué?” Salió fácilmente, bajo la amenaza de quitarle su pensión.