1.5 millones de mexicanos padecen trastorno depresivo crónico llamado distimia

Una especialista en salud mental señaló que la distimia se caracteriza por un desgano profundo, irritabilidad, poca energía, estrés, insomnio e inapetencia.

¿Estás deprimido, desganado… o padeces distimia? (Especial)
Editorial Milenio
México /

La distimia es un trastorno depresivo crónico, poco conocido y de síntomas confusos que suelen confundirse con desgano, lo que dificulta su diagnóstico, dijo Hiram Ortega, médico del Instituto Nacional de Psiquiatría.

Esta afección, que se estima afecta en México a 1.5 millones de personas, tiene la particularidad de ser un tipo de depresión persistente; es decir, que una persona "todos los meses durante dos años ha tenido la mayoría de los días tristeza y abatimiento", comentó Ortega.

Síntomas

Algunas de los síntomas de este tipo de depresión son:

  • estado de ánimo triste e irritable, 
  • poca energía y fatiga, 
  • baja autoestima, 
  • estrés constante, 
  • falta de concentración, 
  • sentimientos de desesperanza, y 
  • problemas de sueño y apetito.

En los pacientes con distimia también se identifica un alto grado de neuroticismo que genera poca tolerancia a la frustración, exigencias muy altas y rápido desaliento si no logran su objetivo. 

Sin embargo, padecer distimia no siempre genera una disfunción total: la persona aún reacciona a ciertos estímulos que le dan resultados placenteros como salir, convivir, jugar o realizar otra actividad de su agrado. Y aunque pareciera que el paciente de distimia "está bien", luego de unas horas, un día o dos "regresan a un estado de letargo, desinterés, cansancio, culpa, baja autoestima y poca energía", abundó Ortega.


Algunos de los factores que podrían detonar la distimia son: el temperamento de la persona, antecedentes familiares, haber enfrentado duelos complicados y estrés frecuente que, después de un tiempo, sobrepasa la capacidad de la persona.

El médico indicó que aunque aún no hay datos estadísticos, la relación de los factores de riesgo con las actuales exigencias sociales podría favorecer el aumento de casos de distimia en la población joven.

¿Existe una cura?

El tratamiento para la distimia puede durar un año o más, a través de psicoterapia o fármacos para remitir los síntomas, aunque hay personas que podrían volver a presentarlos debido a una predisposición genética o alteraciones en el cerebro.

Sin embargo, confundir el trastorno y evitar la atención médica podría ser grave para el paciente porque "cuando alguien ya está en distimia quiere decir que lleva tanto tiempo deprimido o deprimida", lo que podría derivar en un episodio depresivo mayor, precisó Ortega.


FM​

LAS MÁS VISTAS