Durante la transición a la vejez se disminuye la producción de estrógeno, hormona vinculada no solo con la actividad sexual, sino con la capacidad de contrarrestar fragilidad y porosidad ósea y tiene efecto preventivo contra enfermedades cardiovasculares y cerebro vascular.
Pero cuando las mujeres experimentan cambios fisiológicos que anteceden y siguen a la menopausia por la disminución progresiva de la función ovárica, condición conocida como climaterio, se presentan diversas complicaciones de desarrollar enfermedades, explicó Cuauhtémoc Celis, presidente de la Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia y Ginecología (FEMECOG).
Celis coincidió con Imelda Hernández, especialista en ginecología endócrina y menopausia, que el déficit estrogénico durante este periodo aumenta las posibilidades de padecer múltiples enfermedades entre las que destacan las cardiovasculares y la osteoporosis, además de complicar padecimientos crónicos ya existentes.
Hernández Marín detalló que “aunado a esta situación, los factores de riesgo como la mala alimentación, el tabaquismo y el sedentarismo, pueden provocar altas concentraciones de colesterol total, triglicéridos, colesterol LDL (malo) y disminución del colesterol HDL (bueno)”
Se estima que una de cada tres mujeres de más de 50 años sufrirá al menos una fractura osteoporótica a lo largo de su vida y es durante el climaterio que las mujeres están más expuestas a sufrir de osteoporosis.
Es esencial el cuidado del sistema óseo desde los 30 años a través de alimentación, suplementación y hábitos saludables, puede prevenir el desarrollo de esta silenciosa enfermedad.
Además, datos oficiales reportan que fallecen anualmente cerca de 35 mil mujeres en México por enfermedades cardiovasculares.
Esta etapa de climaterio y de menopausia, misma que va de los 35 a los 65 años, debe ser motivo de atención a través de terapia hormonales estrogénicas, que ayudan a aliviar los síntomas y proteger contra las enfermedades propias de esta etapa, inclusive problemas de cambios de humor,
El tratamiento se lleva a cabo de acuerdo a las necesidades y estilo de vida de las pacientes: transdérmica, oral o inyectable.
La vía transdérmica, además del control de síntomas moderados a severos, ofrece ventajas como la facilidad de aplicación, apego al tratamiento, rápida absorción, niveles de fármaco estables, no causa irritación, permite individualizar la dosis y tiene un buen perfil de seguridad que hace que se pueda emplear en pacientes con riesgo leve a moderado.
Los especialistas hicieron un llamado a las mujeres a que acudan con su médico para además de prevenir algún padecimiento y recibir un tratamiento adecuado, tengan la oportunidad de disfrutar y sentirse plenas durante esta etapa tan importante de la vida.
dmr