La farmacéutica AstraZeneca se encuentra por liberar, a finales de mayo, los resultados clínicos de dos potenciales tratamientos contra el covid-19, uno de los cuales evitaría que las personas infectadas y en estado crítico requieran ventilación mecánica y, en el segundo caso, reduciría el colapso de corazón y riñones entre pacientes contaminados y que cursan con alguna enfermedad crónica.
Alberto Hegewisch, director médico de AstraZeneca en México, explicó que uno de los estudios clínicos se efectúa con el inhibidor acalabrutinib que, actualmente, se suministra a un centenar de pacientes hospitalizados en condición grave en Estados Unidos, España, Francia, Italia e Inglaterra para reducir la inflamación generada en los tejidos pulmonares, así como las múltiples complicaciones que derivarían en una intubación.
“Estamos evaluando cómo se reduce la respuesta inflamatoria, la severidad de la progresión de la enfermedad y evitar la intubación. El estudio clínico concluirá a finales de mayo y si los resultados son positivos, pasaríamos a una segunda fase donde México está considerado para incluir a pacientes graves, previa autorización del comité médico, ético y de bioética”, explicó en entrevista con MILENIO.
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La molécula acalabrutinib, aprobada en México para el tratamiento de adultos con linfoma de células del manto - cáncer en la sangre avanzado sin respuesta a tratamiento previo- es un inhibidor de tirosina quinasa que “bloquea, apaga y disminuye los mediadores inflamatorios” y, al hacerlo, reduce las complicaciones, las estancias hospitalarias y el uso de ventilación mecánica.
Se observó que pacientes con covid-19 en estadíos graves han visto afectaciones en bronquios, pulmones y en ocasiones neumonía fulminante. Pero, de acuerdo a Hegewisch, con acalabrutinib se pretende bloquear, apagar y disminuir todas las señales y todos los mecanismos que se envían a los bronquiolos y a los alvéolos para generar una inflamación masiva.
“La idea es regular los mecanismos que propician esas inflamaciones y aunque hay varias vías, se bloqueará las más importantes para que el sistema autoinmune pueda combatir la infección, tenga síntomas leves y no se ocasione daño severo”, dijo.
Agregó que esto, potencialmente, mejoraría la oxigenación de la sangre (la gente satura de 95 a 100, menos de eso comienza a tener problemas respiratorios) y no caer en situaciones de severidad en la que requieran intubación.
“Nosotros lo que buscamos es que los pacientes no requieran intubarse”, subrayó en la entrevista.
El otro estudio clínico se lleva a cabo con los Institutos de Salud en Estados Unidos, con el fármaco dapagliflozina, aprobado para el tratamiento de pacientes con diabetes tipo 2 y recientemente la FDA le otorgó el permiso para usarse para la insuficiencia cardiaca.
“En estudios clínicos se demostró que reduce las complicaciones cardiacas y renales entre las poblaciones infectadas con covid-19 y que tienen factores de riesgo, como diabetes, antecedentes de infarto e hipertensos. Se ha visto que los pacientes infectados tienen un mayor riesgo de tener esas complicaciones al estar hospitalizados”, agregó.
Así, se estudió a 900 pacientes de Estados Unidos, a los que se les está suministrando dapagliflozina buscando si después de 30 días reducen o tuvieron menos complicaciones.
La compañía farmacéutica también participa con el Instituto Jenner y el Grupo de Vacunas de Oxford, en el desarrollo de una potencial vacuna para prevenir la infección por covid-19 provocada por el SARS-CoV-2.
“El estudio arrancó con mil voluntarios sanos y se está en un proceso de evaluación de cómo previene la infección de la covid. “Esperamos los primeros resultados a finales de mayo, lo que permitiría pasar a un segundo estudio sobre la potencial protección. Nosotros participaremos en la producción y manufactura”.
La potencial vacuna conocida como ChAdOx1 nCoV-19 saldrá este año de mostrar su efectividad y eficacia, concluyó.
nerc