Cada año, en septiembre se conmemora el Mes del Cáncer Hematológico o de la Sangre, esto con la finalidad de concientizar y sensibilizar sobre esta enfermedad y apoyar a quienes la padecen. Las neoplasias malignas en la sangre o la médula ósea afectan la producción y el funcionamiento de las células sanguíneas.
En entrevista para MILENIO, el doctor Max Saráchaga, director médico de Amgen México, recalca la importancia de hablar de estos temas para la prevención y detección oportuna que permita a los pacientes recibir el tratamiento y la atención adecuada.
Tipos de cáncer hematológico
El cáncer hematológico tiene origen en el tejido que forma la sangre como la médula ósea o las células del sistema inmunitario. Los tipos de cáncer de la sangre más frecuentes son la leucemia, el linfoma y el mieloma múltiple.
De acuerdo con cifras de Organización Mundial de la Salud (OMS) hasta el 2020 se registraron 176 mil 404 casos de mieloma múltiple 474 mil 519 de leucemia. En México, hay alrededor de 5 mil personas viviendo con mieloma múltiple y cada año hay más de mil casos nuevos de leucemia linfoblástica aguda.
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Leucemia
Este tipo de cáncer afecta los tejidos que conforman la sangre, incluida la médula ósea. Produce un incremento desmedido de glóbulos blancos e impide que se produzcan glóbulos rojos, plaquetas y leucocitos saludables. El especialista comenta que es la forma de cáncer más común durante la infancia.
"La leucemia linfoblástica aguda de hecho es el cáncer infantil más frecuente. Es un cáncer raro, quizá veamos en México unos mil 200 casos nuevos al año y tan sólo hace una generación era un cáncer que no se podía curar, el 100 por ciento de los niñas y de los niños fallecían por esta leucemia, hoy podemos curar gracias a la bioctecnología, a otro tipo de avances médicos, a la infraestructura hospitalaria, podemos curar casi al 90 por ciento de estos pacientes", señala.
Mieloma
Es un cáncer que comienza en las células plasmáticas, un tipo de glóbulo blanco de la médula ósea. Puede afectar desde el sistema inmunológico y la producción de glóbulos rojos hasta los riñones y los huesos.
"Es una enfermedad de adultos. Tendremos probablemente unos 5 mil pacientes con la enfermedad en todo el país, pero no es una enfermedad que veamos en niños. Se empieza a ver a partir de los 40 años y también hoy hay tratamientos disponibles que, si bien, con frecuencia no se puede curar la enfermedad, se consiguen vidas muy largas ya con muy buena calidad de vida, y por muy largas estamos hablando de hasta 15 o más años", comenta el doctor Saráchaga.
Linfoma
Se origina en el sistema linfático, el cual se conforma de los tejidos y órganos que producen, almacenan y transportan los glóbulos blancos que combaten las enfermedades. "Son otro tipo de cánceres hematológicos, los más frecuentes que también hoy tienen múltiples posibilidades de curación".
El especialista apunta que la diferencia fundamental entre el mieloma, la leucemia y el linfoma es el tipo de célula maligna y de ahí que clínicamente se comportan de manera distinta, pero su inicio "es más o menos similar".
El doctor comenta que síntomas como "un poquito de fiebre sin una explicación, cansancio, debilidad, palidez, falta de energía, sangrado también sin ninguna explicación, aparición de moretones, son datos que nos pueden hacer pensar que estamos ante un problema de este tipo".
Saráchaga resalta la trascendencia hacer un diagnóstico lo antes posible porque el pronóstico del paciente va a cambiar mucho, entre más temprano se inicie el tratamiento.
amt