Entre los dos y cinco años de edad, hay 10 millones de niños en México que padecen caries, lo que representa un grave problema de salud bucal desde edades tempranas. La causa no es sólo por ingerir dulces como alimento recurrente entre los pequeños, sino por la falta de higiene bucal, alertó la UNAM.
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¿Cómo se presenta la caries en los bebés?
Tras ser alimentados con leche materna o fórmulas, a los bebés se les debe aplicar hábitos de higiene bucal.
De lo contrario, esta etapa de la vida es un indicativo de problemas dentales que se podrían presentar en el futuro, además de afectar el crecimiento, interferir con la alimentación, el sueño y la concentración en la escuela, aseguró María Gloria Hirose López, profesora de la Facultad de Odontología de la UNAM.
“La caries es una enfermedad crónica que avanzan rápidamente, y es irreversibles si no se atiende a tiempo.
En los niños, se presenta principalmente en los dientes superiores anteriores y en los molares, porque la lengua cubre los dientes inferiores cuando se toma el biberón o son amamantados.
Por ello, la limpieza bucal debe hacerse inmediatamente después de alimentar al bebé”, subrayó la académica.
¿Cómo debe ser la prevención en los recién nacidos?
Para evitar la caries, la prevención con hábitos de limpieza es importante.
En las primeras semanas de vida, se debe establecer estos hábitos, incluso antes de que empiecen a erupcionar los primeros dientes, en promedio a los seis meses.
“Se debe quitar el exceso de leche de la encía con una gasa humedecida en agua hervida y fría. Si ya aparecieron los dientes, hay cepillos especiales de látex suaves. Estas acciones deben convertirse en un hábito”, destacó.
María Hirose dijo que no se debe estigmatizar el biberón, pero recomendó no usarlo por la noche y sustituirlo poco a poco por vasos entrenadores.
“Con una buena supervisión del pediatra y del odontopediatra, y con cuidados en casa, el bebé se desarrollará adecuadamente”.
¿Sólo los dulces provocan caries?
Dulces e incluso frutas son considerados alimentos cariogénicos (que producen caries), pero tampoco deben ser estigmatizados.
Aunque un niño coma sano, si no tiene una buena higiene bucal tendrá dientes enfermos.
Hirose López compartió que, en su fase inicial, la caries se visualiza por la aparición de pequeñas manchas blancas.
Si se acude oportunamente al dentista, el daño puede ser reversible con un tratamiento especial a base de fluoruro.
“Después de cada alimento, sin importar cuántas veces coma al día, a un niño se le debe hacer limpieza bucal, aunque el mayor riesgo es en la noche, porque producimos una décima parte de saliva que en el día; la saliva ayuda a limpiar la boca, pero si antes de dormir nos da flojera cepillarnos los dientes, el número de lesiones cariosas se elevará”.
MJA