La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), en coordinación con la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud, inició una investigación tras recibir notificaciones sobre pacientes que aparentemente desarrollaron Infección del Torrente Sanguíneo (ITS) luego de someterse a procedimientos ambulatorios en un hospital privado de la Ciudad de México.
La activación del protocolo especial de vigilancia sanitaria y farmacovigilancia tiene como objetivo contener cualquier posible riesgo sanitario.
Se está prestando especial atención a los pacientes que presentaron reacciones adversas después de recibir anestesia endovenosa durante procedimientos ambulatorios de endoscopía.
La investigación inicial se centra en determinar si las reacciones adversas y la probable ITS podrían estar relacionadas con un lote específico del anestésico Vitalis Siltafel (Propofol) emulsión, identificado como el número PR23J'1 con fecha de caducidad de octubre de 2026.
Durante la visita de verificación, el equipo técnico especializado recabó información que indica que los pacientes afectados desarrollaron diversas reacciones adversas, entre ellas fiebre, hipotensión, astenia, náusea, taquicardia, vómito, cefalea y escalofrío.
Es importante destacar que, hasta el momento, los pacientes se encuentran estables, con la mayoría dados de alta y sin defunciones reportadas.
¿Qué es la bacteriemia?
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la bacteriemia es la presencia de bacterias en el torrente sanguíneo.
Puede ocurrir espontáneamente o como resultado de procedimientos médicos como sondas gastrointestinales, catéteres venosos, procedimientos odontológicos o digestivos, curación de heridas, entre otros.
La bacteriemia puede causar infecciones metastásicas, como endocarditis, especialmente en pacientes con anomalías cardíacas.
Los síntomas pueden variar desde fiebre hasta complicaciones graves como sepsis o shock séptico.
MO