Las secuelas físicas de aquellos pacientes que se han recuperado exitosamente de coronavirus no desaparecen de manera inmediata, y es que pueden llegar a presentar complicaciones y malestares relacionados hasta 80 días después de haber librado la batalla.
Uno de los problemas que pueden presentar después es la fibrosis pulmonar residual, así lo dio a conocer el doctor Leonardo Alfredo Rodríguez, coordinador de Emergencias Epidemiológicas en Guanajuato.
“La persona que cursó la enfermedad puede tener secuelas del agente infeccioso en su cuerpo por hasta un periodo de 80 días”.
De igual manera informó que es normal que la persona presente cuadros de malestar en garganta, dolores de cabeza, ligero dolor torácico y dificultad respiratoria, siendo en el peor de los casos la fibrosis pulmonar.
Se trata de una afección en donde el tejido pulmonar (uno de los órganos más afectados por el coronavirus) va cicatrizando después de presentar un periodo de inflamación, por lo cual este tejido se vuelva grueso y duro, dificultando de esta manera la capacidad respiratoria ya que es posible que posteriormente la sangre no reciba suficiente oxígeno.
“Es una afectación a nivel tejido pulmonar que causa endurecimiento del tejido y eso no permite la respiración adecuada” explica el médico.
Cabe resaltar que hasta el momento no existe una vacuna para el virus y que todo tratamiento es meramente “sintomático” para controlar los malestares de esta enfermedad, variando de acuerdo al perfil de cada uno de los pacientes “Si la persona tiene fiebre, se ataca la fiebre, si la persona tiene dolor, se ataca el dolor”.
A más de 7 meses de conocer el virus, no existe a nivel mundial ningún precedente de reinfección, es decir que una persona anteriormente enferma vuelva a estarlo, por lo que se investiga para descifrar si dicha inmunidad es permanente o periódica.
Es importante destacar que inclusive con la presencia del covid-19 en el cuerpo, no toda la población presenta los mismos síntomas, pues influye la carga viral, por lo que los pacientes ambulatorios son enviados a un aislamiento voluntario durante 14 días en casa, en los cuales personal médico calificado realiza un seguimiento diario de manera telefónica.