En medio de la incertidumbre, familias encuentran un poco de luz, a través del esquema implementado por el personal de salud de distintos hospitales de la entidad, quienes han hecho uso de la tecnología para brindar información a familiares de pacientes con un diagnóstico positivo de coronavirus.
Tal es el caso de Verónica (a quien llamaremos así para cuidar su identidad), pues desde el pasado 15 de mayo su madre, de 72 años, se encuentra hospitalizada en el Centro Médico “Adolfo López Mateos”, en Toluca, por un diagnóstico positivo al virus.
“La salud de mi madre es delicada, estamos aquí en espera de una mejoría. En cuanto a la atención que nos han brindado la verdad que es buena, se nos ha estado brindando información vía telefónica, física, es mucha gente la que está, no nos permiten permanecer aquí, pero no me puedo quejar, la atención se le está dando”.
Las horas de espera, la angustia y la preocupación están latentes, pues dice, al enfermarse uno de los pilares, toda la familia lo hace; hablar de recuperación es hablar también de unidad, pues a pesar de los diagnósticos la familia se encuentra al pie del cañón, buscando esos destellos de luz en medio de la obscuridad.
“Es desesperante no ver a nuestros pacientes, han estado graves o están graves, pero tenemos la oportunidad de estar con ellos, al menos viendo este proceso de recuperación, se siente uno impotente de no poderlos tener a un lado, es desesperante”.
Las videollamadas pasaron de un momento a otro a ser el único contacto con su madre, con los médicos y demás personal de salud, quienes día y noche trabajan para devolver la salud a cientos de pacientes con este mismo diagnóstico.
Los días han pasado, el dolor se vive a la distancia, sin poder tocar las manos de su madre, sin tener contacto físico, pero afirma, lo que importa es ver sus avances, su mejoría, haciendo uso de la tecnología, que también es testigo de esta emergencia.
“Yo sé que está inconsciente, que está sedada, pero con unas palabras creemos que ella puede empezar a reaccionar mucho mejor”.
El llamado, en medio de su incertidumbre, es para la población en general, para aquellos que siguen sin creer en esta enfermedad: es doloroso ver a un familiar en ese estado; pero lo es aún más curando se trata de niños, de pequeñitos.
“Tristemente la gente no entiende la magnitud de esta enfermedad ni la delicadeza, lo vemos como algo simple, algo vano hasta que lo vivimos. Les hacemos el llamado ¡Cuídense, no salgan de su casa, asignen a una persona, con todas las medidas de higiene, de precaución! La gente no entiende y piensan otras cosas, ya que uno está aquí decimos: sí debimos habernos cuidado”.
Al igual que el Centro Médico “Adolfo López Mateos”, otras 10 unidades médicas del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) han implementado el programa de Informes Médicos de Pacientes COVID-19 por Videollamada, con el fin de facilitar el acceso virtual a las áreas de atención médica y camas de quienes se encuentran en recuperación, lo que evita la aglomeración de personas a las afueras de las unidades hospitalarias.
Cómo funciona
Este esquema que permite mantener comunicación directa e inmediata entre familiares de pacientes hospitalizados por esta enfermedad y el personal de los nosocomios ha sido bien recibido por las familias, pues en primer lugar, cuentan con la información respecto al estado clínico de sus pacientes, y por otro lado, se eliminan situaciones de estrés o angustia, al contar con la orientación integral para resolver cualquier duda.
Para el uso de estos dispositivos electrónicos, los trabajadores asignados cumplen con todos los protocolos de higiene y protección personal, y de las normas sanitarias en las Unidades de Cuidados Intensivos, además de que se retroalimentan de experiencias.
El programa opera en los hospitales generales ubicados en Atizapán, Axapusco, Cuautitlán, Ecatepec, Naucalpan, Toluca, Texcoco, el Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos” y el Hospital Materno Perinatal “Mónica Pretelini Sáenz” de la ciudad de Toluca.
KVS