Luego de cuatro meses de incertidumbre mundial tras detectarse en noviembre de 2019 una desconocida enfermedad en China, el covid-19 llegó a Nuevo León el 11 de marzo de 2020, para marcar un antes y un después en la historia de la salud pública del estado.
El gobierno de China reportó el 31 de diciembre de 2019 el primer caso de covid-19 en su territorio, pero estudios posteriores asientan que fue el 17 de noviembre de ese año cuando apareció el primer contagiado con esa enfermedad... y en febrero llegó a México y en marzo a Nuevo León.
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“Se realiza una prueba en el laboratorio estatal en donde se confirma la enfermedad covid-19. El paciente se encuentra en su casa en buen estado de salud”, informó el 11 de marzo de 2020 el entonces secretario de Salud del Estado, Manuel de la O Cavazos.
Tras la noticia, Nuevo León entró en alerta máxima sanitaria y de inmediato se anunciaron medidas que involucraban la suspensión de clases presenciales, además del cierre de distintos sectores de la economía.
La alerta se pintó de tragedia apenas unas semanas después, cuando el 3 de abril del 2020 se notificó el primer deceso oficial en el estado a causa de esa enfermedad hasta ese entonces desconocida: fue el de un hombre de 77 años.
Ante el aumento significativo de infecciones, el Gobierno estatal implementó medidas extremas para, dijo en ese entonces, evitar la propagación del mal.
Las más polémicas fueron el uso obligatorio de cubrebocas, la suspensión de clases, eventos masivos, el cierre de antros, bares, casinos, la reducción del servicio en el transporte, que durante semanas operó únicamente de 5 a 10 de la mañana y de 6 a 10 de la noche, además de restricciones a la movilidad al 100 por ciento durante los domingos.
Lo anterior fue catastrófico para la economía del estado, para la mayoría de los comerciantes, miles de los cuales optaron por cerrar sus negocios.
Dos años después, el 27 de febrero de 2022, Nuevo León se convirtió en el primer estado en decretar el fin de la cuarta ola de coronavirus en su territorio y convertirse en la primera entidad de México en adoptar la reapertura económica al 100 por ciento.
“El día de hoy oficialmente decretamos la salida de la cuarta ola de covid y la reactivación total en el estado de Nuevo León”, anunció García Sepúlveda ese día.
Operan negocios con normalidad tras pandemia
Luego de la debacle económica registrada desde 2020 a 2022 en Nuevo León a causa del covid-19, todo ha vuelto a la normalidad en los negocios de todos los municipios del estado, los cuales permanecen abiertos y sin ninguna restricción.
Sin embargo, los comerciantes todavía se encuentran en alerta de que una inesperada contingencia pudiera llegar nuevamente y afectarlos en sus negocios.
El 11 de marzo de 2020 será recordado como el día en que la vida de los nuevoleoneses cambió para siempre, al darse a conocer el primer caso de coronavirus.
A partir de ahí la Secretaría de Salud estatal estableció estrictas medidas sanitarias y cierres para evitar la propagación del virus.
Las acciones implementadas afectaron principalmente a los comerciantes, quienes tuvieron que cerrar sus negocios por días y ajustarse a horarios de servicio.
También a tener que cumplir con una serie de condiciones para operar, como instalar termómetros, gel antibacterial, tapetes y permitir solo el acceso a personas que usaban cubrebocas.
Cientos de restaurantes y tiendas no pudieron costear la renta o el pago a empleados y tuvieron que cerrar... muchos de ellos para siempre.
“Vinieron de Protección Civil a sacarnos... cerramos tres meses. Pensábamos que iba a ser una semana, unos días, pero se prolongó a meses, y pues estaba difícil porque había que sostener como quiera el negocio, con los gastos, con impuestos, con todo, no había de otra, teníamos que seguir”.
“Tardamos como un año para que volviéramos a tener ventas parecidas a las del año anterior a la pandemia”, declaró José Luis de la Cruz, comerciante.
También la industria restaurantera se vio afectada, ya que tuvo que adaptarse a las nuevas reglas sanitarias y a que los clientes solo pidieran comida para llevar.
“Muchos de los restaurantes estuvimos por cerrar, sí fuimos afectados. Tenemos como dos o tres meses que apenas vamos recuperándonos los del área restaurantera, porque cambió mucho el giro”.
“(Durante la pandemia) fue más por aplicación o para llevar, no tuvimos servicio de restaurant los fines de semana; sí nos pegó y apenas vamos levantándonos otra vez en cuestión de ventas”, comentó Álvaro Castillo, encargado de un restaurante.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), un millón 600 mil millones de empresas cerraron de forma definitiva entre octubre de 2020 y julio de 2021.
mrg