Cronobiología, ciencia determinante para la salud: nutriólogos

Salud

Los malos hábitos alimenticios, de sueño y ejercicio han tenido importantes consecuencias en la salud de los mexicanos

Nutriólogos en conferencia. Foto: Dany Béjar
Renata Quintanar
León /

Los nutriólogos Omar Hernández y Paola Vázquez presentaron ponencias en la universidad Iberoamericana campus León, donde expusieron la importancia de cuidar la salud basados en la cronobiología, ciencia que estudia los ritmos biológicos del cuerpo.

Omar Hernández, quien es especialista en el área deportiva, explicó que el estilo de vida de la sociedad post modernista en la que vivimos ha creado malos hábitos alimenticios, de sueño y ejercicio, los cuales han tenido importantes consecuencias en la salud de los mexicanos.


“En la actualidad nos estamos desarrollando en un mundo para el cual no fuimos desarrollados. Cuando cae la noche hay una impresionante cantidad de contaminación lumínica, lo que altera nuestros ritmos de sueño”, compartió.

Señaló en su ponencia que los humanos somos seres de día, por lo cual cuando los ojos detectan la oscuridad al caer la noche y se segregan las hormonas que ayudan a conciliar el sueño y hacen lento al metabolismo.

Indicó que la contaminación lumínica generada por los teléfonos móviles, ordenadores, tableta, etc., han alterado las órdenes que se envían al cerebro y estas producen hormonas de día. Esto distorsiona los ritmos biológicos del cuerpo.


Por su parte Paola Vázquez, nutrióloga e investigadora, expusó las alternativas que se han explorado para tratar una de las principales enfermedades qué hay en el país: la obesidad, además de la mejora de salud en general.

Explicó que lo ideal es tener un patrón de alimentación con orden y reducido en calorías, lo que ha demostrado un mejora sustancial dejando de lado el peso, puesto que se enfoca en el control de glucosa y otras sustancias del cuerpo humano.

“A veces estamos demasiado preocupados por cuántos kilos voy a bajar y no es lo más relevante, si no cómo la salud general mejora con un poquito de ajuste a la dieta con disciplina al disminuir el consumo de azúcares y grasas”, concretó.

Incluyó el concepto de ayuno intermitente, el cual consta de dejar un plazo de 12 horas entre la cena y el desayuno, procurando realizar la merienda antes de las 10 de la noche, lo que ayudará a evitar enfermedades potenciales del desequilibrio de la salud.

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