La automedicación dejó de ser una alternativa para las personas que buscaban la forma de protegerse contra el covid-19, al ver que los fármacos que ingerían no actuaban de la misma forma en unos pacientes como en otros, motivo por el cual dejaron de consumir las recomendaciones caseras y se apegaron a los que indicaban los médicos.
Francisco Díaz Fernández, empresario farmacéutico en esta ciudad, señaló que entre los productos que meses atrás tenían mayor demanda, eran las vitaminas y los retrovirales, mismos que se demostró no ser la solución para evitar contagiarse durante esta pandemia.
Observaron que los síntomas afectaban a cada persona de forma distinta, porque algunos presentaban problemas estomacales como diarrea, inflamación o dolor de garganta, fiebres u otros malestares que podrían considerarse como parte de un padecimiento distinto, por lo que el medicamento que les recomendaban no podía ser el mismo, por eso era necesario que acudieran a recibir una atención más completa, al tener resultados de diversos análisis que les hacían para ver si eran portadores del virus o no, y de esa forma iniciar el tratamiento, porque en otros casos más se trataba de gripas comunes u otras enfermedades que no estaban relacionadas con la pandemia.
En el caso de la atención en los consultorios médicos, detectaron que la gente al inicio de la pandemia no acudía por miedo a ser diagnosticados como positivos, a la par que varios de los galenos se enfermaron, pasaron su periodo de aislamiento y se recuperaron, fue entonces cuando la gente entendió la importancia de tomar medidas preventivas también.
Díaz Fernández señaló que esta pandemia aún no ha terminado y por ello no se debe dejar de usar el cubrebocas, gel antibacterial y otras medidas, porque siguen presentes casos, además hay gente asintomática, por lo que el riesgo de contagio existe.
AFM