La Unión Industrial del Estado de México (Unidem) alertó que si las nuevas medidas para la apertura parcial de negocios se toman de manera descoordinada por los gobiernos de la Ciudad de México y del Estado de México podrían maximizar los contagios de covid19 porque provocará mayor movilidad de una entidad a otra.
Francisco Cuevas Dobarganes, dirigente de la agrupación, reconoció que los anuncios del gobierno mexiquense para iniciar una reapertura parcial, buscan darle un respiro a determinadas actividades comerciales que ya se encuentran en un estado financiero crítico.
El que se permita abrir de manera restringida a algunas actividades formales, dijo, ayudará a dar un respiro y disminuir el riesgo de que cierren definitivamente. Entre la mayoría de la sociedad, se tiene la percepción que las empresas formales tienen recursos y capacidad de financiamiento ilimitados, pero la realidad es que ya tienen pasivos laborales, con arrendadores, con proveedores, fiscales y bancarios que comprometen su viabilidad.
“Tarde o temprano esa situación terminaría por quebrar a una gran cantidad de empresas, instituciones y familias, ya que se romperían las cadenas de proveeduría y hasta se terminaría por afectar sensiblemente la recaudación; posteriormente algunos sectores industriales también saldrían muy afectados como el textil, mueblero, zapatero, de electrónica, línea blanca, entre otros”.
Agregó que con la apertura las plazas comerciales que cerraron desde el 18 de diciembre ahora tendrán la oportunidad de promover ventas que les permitirán que algunos que sus inquilinos desplacen inventarios, ello les dará cierto grado de liquidez con el que podrán, al menos, pagar sus compromisos laborales.
Además, señaló que la situación para muchos comercios en las plazas comerciales es crítica ya que, en el caso de los que venden ropa, sus existencias actuales están enfocadas a la temporada invernal y al menos les darán una oportunidad de que desplacen esa mercancía y les evite guardarla todo un año, y al mismo tiempo, les genere solvencia para reponer inventarios para la temporada de primavera-verano.
Para Francisco Cuevas, abrir gradualmente algunas actividades de gobierno en el Estado de México permitirá que los trámites no se sigan acumulando y provoquen una parálisis administrativa.
Recordó que en diciembre hubo voluntad de los Gobiernos de la CdMx y del Edomex para que las acciones fueran coordinadas y ello, se ha reflejado en la disminución de la movilidad y el aplanamiento de esta nueva curva epidemiológica en los últimos días.
Sin embargo, ahora cada entidad federativa dicta medidas descoordinadas, y actúa como si no se tratara de una megalópolis y fueran geográficamente distantes e independientes.
“El que las plazas comerciales abran en el Estado de México y cierren en la CDMX implicará que haya movilidad de las delegaciones capitalinas hacia los municipios mexiquenses; el que los restaurantes del Edomex cierren los fines de semana y los capitalinos no, tendrá el efecto inverso”.
Remarcó que el hecho de que las dos demarcaciones actúen sin coordinación sólo maximiza los contagios al haber más movilidad y concentración de personas en lo pocos negocios abiertos y en contraparte, afecta la actividad económica en la entidad que tiene cierres; es decir tiene altos costos en la salud y la economía, y mínimos beneficios tangibles.
MMCF