La presidenta del Consejo Coordinador Empresarial del Estado de México (CCEM), Laura González Hernández, indicó que las medidas restrictivas impuestas por el ayuntamiento de Toluca para reducir la movilidad no tienen mucho sentido, dado que si la gente necesita hacer algo lo hará en los municipios vecinos y por ende la movilidad se irá a otro lado. Si se hiciera de forma generalizada y con acciones específicas, expresó, probablemente tendría éxito.
“Los toques de queda en otros países, de manera generalizada, en su momento han funcionado, aunque han sido molestos y motivo de controversia, pero han sido una medida efectiva para que la población entienda, siempre y cuando se aplican sanciones con restricciones muy precisas”.
Ante la restricción para la venta de alcohol hasta las 5 de la tarde y el exhortó a evitar salir después de las 8 de la noche, apuntó que no pueden estar en contra de que se apliquen el mayor número de medidas posibles, especialmente, porque estamos en semáforo rojo y la actividad económica está frenada.
“Cualquier esfuerzo que se haga por mantener el control y reducir la movilidad es bueno, pero también deben ser más estrictos en el uso de cubrebocas, la aplicación de pruebas rápidas y otras medidas que puedan contribuir a que la gente haga conciencia; se mantenga lo más posible dentro de sus hogares y lejos de cualquier posibilidad de contagio”.
Asimismo, reiteró que las reuniones sociales sean controladas, restringidas, suspendidas y sancionadas, especialmente, porque no hay razón de ser para aglutinar a un número determinado de personas. Aunado al control del comercio informal que sigue operando en diversos puntos de la entidad y representa el mayor foco de contagio.
“Mientras el comercio formal está cerrado, el informal está creciendo porque hay necesidad de vender y tener ingresos; pero la gente está saliendo a consumir y contagiarse a estos lugares. Lamentablemente no está sujeto a normas ni disposiciones, está actuando libremente”.
González Hernández recordó que una de cada cinco empresas tuvo que cerrar sus puertas, de acuerdo con el INEGI, porque después de varios meses ya no pudo sostener el embate de la pandemia y para otras la reactivación no fue suficiente para resistir de pie lo que resta del año.
“Lo que pase en el semáforo rojo, lo veremos después del 10 en enero, ya que diciembre es la temporada más fuerte para muchos sectores, aunque algunos pudieron recuperarse un poco con el Buen Fin”.
Al respecto, el presidente del Congreso Laboral del Estado de México, Óscar Moreno Moreno, indicó que las restricciones en Toluca son un poco drásticas y lo que debe impulsarse es la obligación del uso del cubre bocas de forma permanente, el lavado de manos y la sana distancia.
“Tenemos que aprender a vivir con ello para minimizar los contagios, lo único que dice un toque de queda es que las cosas se están saliendo de controla de que se está saliendo de control, porque no hay espacio en los hospitales, debemos seguir siendo enfáticos, la gente debe cuidarse”.
MMCF