¿Es posible que los Tsunamis se formen en México? Esto dicen expertos de la UNAM

Tras el terremeto y las diversas alertas por Tsunami en Japón este 1 de enero de 2024, muchos usuarios se preguntan si esto podría pasar en México

¿Es posible que los Tsunamis se formen en México? Esto dicen los expertos
Alexandra González
Ciudad de México /

El 1 de enero de 2024, un poderoso terremoto de magnitud 7,6 sacudió el oeste de Japón, desencadenando olas de tsunami y causando daños significativos en carreteras, suministro eléctrico, transporte e infraestructuras.

Después de esta reciente catástrofe, los usuarios han comenzado a cuestionarse si desastres naturales similares, como los tsunamis, podrían ocurrir en México. A continuación, proporcionamos información sobre la posibilidad y la historia de tsunamis en México.

Cámara meteorológicacapta momento del terremoto en Japón

¿Qué es un Tsunami?

Un tsunami es una serie de ondas oceánicas de gran energía causadas por disturbios sísmicos bajo el lecho marino, como terremotos, erupciones volcánicas o deslizamientos submarinos. 

Estos disturbios generan un desplazamiento de agua que se propaga en forma de ondas, extendiéndose a través del océano a velocidades extremadamente altas.

Cuando estas ondas llegan a la costa, pueden aumentar en altura y convertirse en olas gigantes que inundan áreas costeras. Es importante destacar que no todas las olas generadas por un tsunami son altas.

Los tsunamis pueden tener impactos devastadores en comunidades costeras, causando inundaciones, destrucción de infraestructuras y pérdidas humanas. 

La preparación y la conciencia son fundamentales para mitigar el riesgo y minimizar los daños en caso de un evento de este tipo.

¿Un Tsunami puede formarse en México?

La palabra "tsunami" a menudo evoca imágenes de Japón, pero en México, el peligro de enfrentarse a un fenómeno natural de este tipo es una realidad latente. 

A lo largo del litoral del Pacífico mexicano, se han registrado al menos 60 tsunamis en los últimos 250 años, según datos recopilados por Gerardo Suárez Reynoso y Virginia García Acosta en 'Los sismos en la historia de México' por la UNAM y el Fondo de Cultura Económica.

La investigadora María Teresa Ramírez, del Instituto de Geografía de la UNAM, destaca la importancia de comprender que donde ocurrió un tsunami en el pasado es probable que vuelva a ocurrir. Aunque no se puede prever cuándo sucederá, enfatiza la necesidad de estar preparados.

“¿Cuándo?, esa es la pregunta, pero debemos estar preparados”, escribe.

Aunque comúnmente se asocia a Japón con este tipo de fenómenos, la historia demuestra que México, particularmente en su costa del Pacífico, no está exento de riesgos de tsunamis.

Tsunami: por qué se crea | Freepik

Éste fue el Tsunami más fuerte que ha tocado tierra en México


En México, el tsunami más notable registrado en documentos históricos tuvo lugar en 1787, desencadenado por un terremoto de magnitud 8.6 en las costas de Guerrero y Oaxaca. 

Un informe respaldado por la UNAM valida este evento con evidencias geológicas, siendo la investigación publicada en la revista Nature–Scientific Reports.

La investigadora María Teresa Ramírez resalta la importancia de reconocer que donde ha ocurrido un tsunami en el pasado, existe la probabilidad de que vuelva a suceder. Aunque no se puede prever cuándo ocurrirá, destaca la necesidad de estar preparados.

Mediante el uso de la paleosismología y el análisis de la geología de los tsunamis, Ramírez identificó tanto el tsunami de 1787 como uno previo en 1537. Su investigación se basó en detallados documentos históricos que describían las inundaciones en las costas de Oaxaca y Guerrero.

Los cálculos geológicos sugieren que el agua se infiltró en la tierra hasta una distancia de un kilómetro y medio, mientras que los relatos históricos indican que el tsunami llegó hasta cinco kilómetros de la costa.

María Teresa Ramírez subraya la importancia de la preparación y educación de la población en las áreas costeras como Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas: “Con estos antecedentes no debemos asustarnos, pero sí estar preparados”, expresó.

Enfatiza la necesidad de que, ante un terremoto, las personas puedan desplazarse a zonas elevadas o refugiarse en estructuras con cimientos sólidos que no colapsen debido a la acción del mar.

Mira el reporte completo aquí:


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