Durante el año 2023, la quinta causa de muerte en Nuevo León fueron las enfermedades cerebrovasculares con mil 854 casos, mientras que a nivel nacional fueron la sexta causa de defunciones con 34 mil 469.
Según información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México el año pasado las enfermedades cerebrovasculares fueron la cuarta causa de defunciones para las personas de 65 años y más, la quinta para el grupo de 55 a 64 años, la séptima para el de 45 a 54 años, y la décima para el rango de 35 a 44.
De acuerdo con la autoridad de cero a 34 años las enfermedades cerebrovasculares no se ubican en el país dentro de las diez principales causas de muerte.
Para visibilizar y concientizar sobre este tema, cada año se conmemora el Día Mundial de los accidentes cerebrovasculares y del ictus el 29 de octubre.
Y sobre esta fecha, el gobierno del país publicó que "el infarto cerebral sucede cuando el suministro de sangre al cerebro se interrumpe o se reduce (isquémico) o debido a la ruptura de un vaso sanguíneo dando lugar a un derrame (hemorrágico), esto impide que el tejido cerebral reciba oxígeno y en pocos minutos las células cerebrales comienzan a morir."
"En México, la ECV ha cobrado gran relevancia en los últimos años, por su preponderancia como causa de morbilidad y mortalidad general, se estima que la ECV contribuye con la mitad de los problemas neurológicos atendidos en los hospitales generales", señala la autoridad.
Se estima que, en nuestro país, una de cada seis personas tendrá un episodio de este padecimiento a lo largo de su vida.
En los últimos 15 años se observó un incremento en la mortalidad por accidentes cerebrovasculares, y quienes sobreviven a un evento vascular cerebral pueden presentar secuelas desde leves hasta severas, tales como parálisis, problemas de raciocinio, del habla, de visión y en la coordinación motora.
"De acuerdo con la OMS, la ECV representa la segunda causa de mortalidad en el mundo. Uno de cada cinco casos fallece y tres de cada cinco queda con secuelas", indican los datos oficiales.
¿Cuáles son los signos de alarma?
- Entumecimiento, debilidad o parálisis de la cara, el brazo o la pierna, en uno o ambos lados del cuerpo y que aparece en forma repentina.
- Ocurrencia súbita de visión borrosa o reducción de la visión en uno o ambos ojos.
- Aparición brusca de mareos, pérdida del equilibrio o caídas sin explicaciones.
- Incapacidad repentina para comunicarse ya sea por dificultad para hablar o entender.
- Aparición súbita de dolor de cabeza, de gran intensidad y sin causa conocida.
Los factores de riesgo que propician el desarrollo de esta enfermedad son presión arterial alta, problemas cardíacos, diabetes, colesterol alto y tabaquismo, por lo que para evitar este padecimiento se recomienda llevar un estilo de vida saludable.
nrm