El cempasúchil es uno de los elementos que tienen que estar incluidos en las ofrendas de día muertos sí o sí; sin embargo, hace un año debido a la pandemia por covid-19 esta planta tuvo una sobreproducción, por lo que en muchos lugares no se sabía qué hacer, lo que ocasionó perdidas económicas entre los productores.
Y es que para satisfacer la alta demanda de cempasúchil (mejor conocida en el mundo de los biólogos como Tagetes erecta) cada año se producen alrededor de 21 mil toneladas de manojos de esta flor y dos millones de plantas, así que esta situación llevó a un grupo de científicos a aprovechar esto.
Encabezado por Alejandro Manzano Ramírez, adscrito al Cinvestav Unidad Querétaro, en colaboración con Flavia Loarca y Sandra Olimpia, ambas del posgrado de alimentos de la Universidad Autónoma de Querétaro, buscaron una alternativa para el uso de esta flor endémica de México, sobre todo por el incremento en años recientes de su producción.
De acuerdo con Karen Magaly Soto Martínez, posdoctorante del Cinvestav y parte del grupo de investigación, cada año existe gran desperdicio de cempasúchil después de la temporada de Día de Muertos, de modo que se plantearon analizar los compuestos que tiene esta flor para idear alguna forma de aprovecharlos.
Fue así como decidieron emplear los compuestos fenólicos y carotenoides del cempasúchil para sintetizar nanopartículas de oro que pueden ser empleadas en tratamientos contra el cáncer de colon; una investigación previamente trabajada el grupo de Alejandro Manzano Ramírez.
El efecto que buscaron al adicionar las sustancias del cempasúchil es brindar a las nanopartículas de oro mejores efectos citotóxicos contra las células cancerosas; al tiempo que los compuestos de la flor ayudaron a la estabilización de las partículas al proporcionarles electrones.
Una vez recolectadas las flores de cempasúchil, se llevan a un proceso de secado por el sol, posteriormente son molidas y se extraen los compuestos fenólicos con ayuda de solventes como etanol y agua, para posteriormente utilizarlas como agentes reductores en la síntesis de las partículas de oro.
La posdoctorante del Cinvestav explicó que los compuestos fenólicos son sustancias presentes en plantas y frutas, con características que ayudan a combatir enfermedades o plagas, estas sustancias, al aplicarse en tratamientos médicos, también ayudan a reducir los radicales libres formados al interior del organismo en edades adultas.
Cabe mencionar que los radicales libres están relacionados con daños a nivel celular propios del envejecimiento. En este sentido, los compuestos fenólicos al presentar alta capacidad antioxidante, son de mucha utilidad en el desarrollo de propuestas como la síntesis de nanopartículas de oro para el tratamiento de cáncer.
De hecho, los investigadores del Cinvestav no solo emplean al cempasúchil como fuente de compuestos fenólicos en la síntesis de nanopartículas orientadas a tratamientos médicos, sino también otras plantas de uso común en México, como el gordolobo (Verbascum thapsus) y algunos residuos de la industria vinícola.
De esta manera, al tiempo que buscan contribuir con soluciones médicas para un problema importante de salud, como es el cáncer de colon; los investigadores de Cinvestav también ofrecen alternativas a los productores del campo nacional.
bgpa