Fatiga crónica, alteración del olfato, ansiedad, insomnio, estrés, problemas respiratorios y musculares, entre otras secuelas que ha dejado en la gente tanto los contagios por covid-19 como el confinamiento por la pandemia, están siendo atendidos con eficacia por la medicina homeopática.
En entrevista con MILENIO Puebla, el médico homeópata Antonio Hernández González apuntó que 70 por ciento de los pacientes son mujeres, seguido por un alto número de menores, además de que una de las principales diferencias entre las terapias es que el remedio homeopático se prescribe de forma personalizada.
“Aunque a un grupo de personas le dé covid, cada uno se va a enfermar de manera diferente. Esa manera de enfermarse se relaciona tanto con lo que está viviendo emocionalmente como el problema orgánico que está presentando, es decir, los trastornos de obesidad, problemas de alimentación, los hábitos, todo eso nos genera dificultades que empeoran o que hacen que la enfermedad tome otro curso”.
Precisó que alteraciones del sistema nervioso, problemas psicológicos y emocionales, así como falta de interés para relacionarse son los principales malestares que reportan sus pacientes, sin embargo, a nivel orgánico hay muchos problemas de tipo neurológico, como irritación, inflamación o trastornos musculares, dificultades para moverse, tos, catarro y algunas secuelas con el olfato.
El especialista explicó que la medicina homeopática se elabora a partir de sustancias de animales, plantas, vegetales, entre otras: “Lo que hacen es generar información con unas ultradinamizaciones, es decir, la información que se contiene en una sustancia se diluye en una base de alcohol con ciertas características y especificaciones”.
A partir de ello se obtiene una información “de orden vibratorio, como coherencia entre las moléculas que después les permite generar un proceso vibratorio en todo el organismo. Cuando un tejido se altera genera una modificación vibratoria, cuando se toma el medicamento homeopático lo que hacemos es estimular a que el organismo se vaya recuperando y pueda salir con ese equilibrio vibracional”.
Hernández González comentó que en comparación con la medicina convencional, su mayor beneficio “es la integración del individuo. Cuando utilizamos este tipo de medicamento lo tenemos que considerar como un todo (…) Vamos integrando los procesos emocionales, culturales y sociales, y el mismo proceso de enfermedad”.
Otro de los beneficios es que su consumo no daña al organismo en contraparte con el empleo excesivo de fármacos: “No tiene efectos tóxicos secundarios (…) ni tan agresivas como luego ocurre con los efectos toxicológicos de la medicina alopática”.
De igual forma, comentó que este tipo de tratamientos tiene un costo menor: “Es muy barato. Hace algún tiempo se intentó integrarlo a los sistemas de Salud pero ha habido rechazo precisamente por el costo, es muy económico, no hay comparación con el tratamiento. Es algo a lo que la gente puede acceder”.
Asimismo, Hernández González resaltó que su empleo permite recuperar la homeostasis o equilibrio que lleva a la salud, pero aclaró que en el caso de problemas emocionales debe considerarse al individuo, “porque hay personas que tienen más capacidad para soportar, las que no la tienen van a presentar un trastorno que puede ser muy intenso o solo puede ser la manifestación de un problema emocional que tienen de manera recurrente o en el pasado”.
Por ello, refirió que en algunos casos logran superar estos trastornos en 15 o 20 días y otros pueden durar algunos meses.
Lo pueden encontrar en la Privada 3 B Sur número 4507, en la ciudad de Puebla.
CHM