En Puebla, hay 7 mil 500 pacientes de todos los grupos etarios que padecen afecciones renales. De estos hay mil 400 requieren terapia de sustitución y el 10 por ciento es de menores de edad, por ello autoridades estatales inauguraron dos unidades de hemodiálisis en dos hospitales.
Se trata del Hospital para el Niño Poblano y el Hospital General del Norte, con las que, de acuerdo al secretario de salud, José Antonio Martínez, las familias con pacientes con problemas renales se ahorrarán hasta 180 mil pesos.
En su intervención el secretario de salud, detalló que este padecimiento provoca que los riñones pierdas su capacidad de eliminar deshechos, explicó que hay tres maneras de sustituir la función renal, la diálisis peritoneal, la hemodiálisis y el trasplante renal, en donde apoyarán a los poblanos.
En cuanto a la compra de medicamentos y tratamiento de sustitución, en caso de no tener seguridad social deben invertir hasta 180 mil pesos, gasto que calificó como catastrófico.
Por su parte, el gobernador Miguel Barbosa, afirmó que en 2023, acudirán a los hospitales de Tehuacán, Teziutlán, Huauchinango y al General del Sur en la capital poblana para que Puebla tengan seis unidades.
Adicional a esto enlistó la construcción de las unidades de oncología y padecimientos cardiovasculares también en San Andrés Cholula.
“Estos esfuerzos no solamente son parte de las ideas de la Secretaría de Salud, son ideas mías que las empuje con ayuda de Tereza Castro Corro, secretaria de Finanzas, y las seguiré empujando”, comentó.
Puebla para 2023 también contará con una unidad de atención para personas autistas, tanto grandes como chicos que recibirán supervisión clínica profesional.
Lo anterior, dijo, se debe al aumento en el presupuesto de los servicios de salud, al destacar que para 2023 se destinarán 13 mil millones de pesos, lo que representa 5 mil millones de pesos más a lo destinado este año.
CHM