Estado de México sigue con reportes de violencia obstétrica en los hospitales

Inegi destaca que en el Estado de México una de cada cuatro pacientes en hospitales públicos son víctimas de malos tratos; ocupa el primer lugar del país y le sigue CdMx.

Un alto porcentaje se queja del tratamiento recibido en las unidades médicas. | Pexels
Toluca /

En el Estado de México al menos 4 de cada 10 mujeres de entre 15 y 49 años de edad que tuvieron un parto sufrieron algún tipo de maltrato, por parte de quienes las atendieron, según detalla el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), que ubica al Estado de México como el primer lugar nacional en violencia obstétrica. 

De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2016, que es la primera encuesta nacional que incluye una sección para valorar la atención obstétrica que las mujeres recibieron durante el último parto, por parte del personal que las atendió, coloca al Estado de México por arriba de la incidencia nacional en este tipo de violencia.

Datos nacionales

A nivel nacional esta encuesta precisa que 33.4 por ciento de las mujeres entre 15 y 49 años que tuvieron un parto manifestaron haber sido maltratadas por quienes las atendieron. En contraste, en el Estado de México este indicador alcanza 39.5 por ciento, lo que equivale a prácticamente 4 de cada 10 casos. Con la mayor incidencia también se encuentra la Ciudad de México (39.2); Tlaxcala (37.7); Morelos (37.2) y Querétaro (36.9); en contraste, los estados con los menores casos son: Sinaloa con 28.0; Nuevo León, 26.9; Chihuahua, 26.3; Guerreo, 26.3 y Chiapas con 20.8.

La falta de cifras impide vislumbrar el impacto que la violencia obstétrica. (Especial)

Situaciones experimentadas

De acuerdo con este instrumento estadístico, los gritos y regaños se posicionaron como la forma más común de violencia obstétrica, con 11.2 por ciento, le sigue el tardarse mucho tiempo en atenderla porque le dijeron que estaba gritando o quejándose mucho, con 10.3 por ciento. 

Con 9.9 por ciento se encuentra el que la ignoraban cuando preguntaba cosas sobre su parto o sobre su bebé; con 9.2 se encuentra que le presionaron para que aceptara que le pusieran un dispositivo o la operaran para ya no tener hijos(as); con 9.2 la obligaron a permanecer en una posición incómoda o molesta

Con 7 por ciento le dijeron cosas ofensivas o humillantes; con 4.8 por ciento se negaron a anestesiarla o aplicarle un bloqueo para disminuir el dolor, sin darle explicaciones y con 4.2 le colocaron algún método anticonceptivo, la operaron o estilizaron para ya no tener hijos(as) sin preguntarle o avisarle.

Instituciones con más quejas

A nivel nacional, las instituciones que concentran el mayor número de casos de violencia obstétrica son: 

  • IMSS con 40.8; le sigue hospital público de la entidad federativa con 38.7; con 34.7 se encuentran los centros de salud; con 30.7 los hospitales o clínicas del ISSSTE de la entidad federativa; con 20.8 el hospital o clínica del ISSSTE; con 22.1, otro; con 18.2 hospital o clínica privada; con 17.7 consultorio médico particular y 4.5 en casa con partera o curandera. 

¿Qué es este tipo de agresión?

La violencia obstétrica se configura por parte del personal médico, paramédico, de enfermería y administrativo de las instituciones de salud cuando se daña o denigre a la mujer durante el embarazo, el parto, post parto o en emergencias obstétricas, vulnerando sus derechos mediante tratos crueles, inhumanos o degradantes.

A pesar de contar con estos datos nacionales, uno de los principales retos que se observan es la falta de cifras específicas, por edades e incluso municipios. En el documento “Curso de sensibilización para prevenir la violencia obstétrica, dirigido al personal de salud y estrategias informativas para las adolescentes embarazadas en el Hospital Materno Perinatal “Mónica Pretelini”, a cargo de Maricarmen Gómez Muñoz, se señala que la falta de estadísticas desagregadas por grupos etarios más precisos, impiden vislumbrar el impacto que la violencia obstétrica tiene sobre las mujeres, a través de distintas etapas de desarrollo –niñez, adolescencia y edad adulta-, así como de periodos reproductivos específicos –embarazo, parto y puerperio. 

A lo anterior, puntualiza la autora, podría agregarse el número de mujeres que recibieron intimidaciones o abusos al recurrir a algún servicio ginecológico, por cuestiones ajenas al embarazo. De igual forma, la autora señala la importancia de difundir que la violencia obstétrica es un delito, ya que la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Estado de México, que salvaguardar el derecho de todas las mujeres a ser tratadas sin violencia ni discriminación.

KVS

  • Monserrat Mata
  • monserrat.mata@milenio.com
  • Reportera en MILENIO Estado de México desde 2016, egresada de la Facultad de Humanidades de la UAEMex. Escribo sobre Salud, Desarrollo Agropecuario y Medio Ambiente.

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