Los infartos que se presentan en jóvenes llegan a tener un índice mayor de mortalidad que aquellos registrados en adultos mayores, ya que las arterias no están preparadas para esta irregularidad, destacaron especialistas del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM).
El jefe de Servicio de Cardiología y Cirugía Cardiaca del Centro Médico del ISSEMyM, Marco Antonio Hernández Mercado, refirió que si bien la prevalencia de infartos en el Estado de México ronda el tres por ciento, en pacientes de entre 40 y 60 años, en menores de 30 años apenas alcanzaría el uno por ciento, índice que va en incremento como consecuencia de los estilos de vida poco saludables, la inactividad física, el estrés, entre otros factores.
“En jóvenes no es común y resulta es catastrófico, porque un paciente joven tolera menos un infarto que un adulto”.
El especialista sostuvo que bajo las actuales condiciones de vida donde confluyen los malos hábitos alimenticios, el consumo excesivo de grasas y carbohidratos, el sedentarismo, así como como el estrés, los infartos se están registrando cada vez a menores edades, lo que pudiese representar mayores riesgos a la salud e incluso un aumento en la mortalidad por esta causa.