Desde las 4:30 de la mañana, familias comienzan a formarse en los módulos instalados por la Secretaría de Salud del Estado de México, en el municipio de Metepec, para poder acceder a una prueba rápida para la detección de covid-19, esto ante el repunte de casos y defunciones por esta enfermedad.
En un recorrido realizado por MILENIO Estado de México, se observaron largas filas desde las 6:30 de la mañana, tanto en el módulo ubicado en el Recinto Ferial, como en el Centro de Salud con Atención al Adulto Mayor de Metepec.
En el caso del módulo en el Recinto Ferial, la fila iniciaba en la calle Árbol de la Vida, continuando en avenida Estado de México, para finalmente doblar sobre Avenida Tecnológico, a la altura del Hospital General Regional No.251 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Mientras que en el instalado en el Centro de Salud con Atención al Adulto Mayor de Metepec son dos las filas que se aprecian, una de vehículos y otra de personas que esperan ser atendidas, quienes a pesar de las bajas temperaturas llegaron antes de las seis de la mañana para formarse y en su caso acceder a las pruebas, existen casos en los que a pesar de permanecer horas formados ya no alcanzan a realizarse la prueba.
La primera en esta fila fue la señora María de la Luz, que en compañía de su hijo llegó aproximadamente a las 4:30 de la mañana para poder realizarse esta prueba, ya que es un requisito indispensable para poder regresar a su centro laboral, donde se empeña como personal de limpieza.
“Yo trabajó en limpieza, yo no tengo para poder pagar una prueba; pero me la están pidiendo para regresar a trabajar. No se me hace justo que haya formados carros, que se ve que no valen cinco pesos, yo pediría que nos den prioridad a los que no tenemos”.
Para María de la Luz la búsqueda comenzó desde las cuatro de la mañana, pues a pie salió de su casa con rumbo al módulo en el Recinto Ferial; pero al ver que había varios vehículos en espera decidió regresar al Centro de Salud con Atención al Adulto Mayor de Metepec.
Para ella y su familia, el pagar una prueba en algún laboratorio particular es prácticamente imposible, pues con los mil pesos que gana semanalmente tendría que “quedarse sin comer” para adquirir esta prueba.
“Estamos aquí desde 20 para las 5:00, yo tengo que mandar los resultados al trabajo, para que se aseguren que ha estoy sana. Se me hace injusto, allá en el Recinto Ferial ve camionetas de lujo, yo soy sola y uno apenas va saliendo con los gastos y le van a dar prioridad a alguien que tiene para pagarlo, no se me hace justo”.
MMCF