El condado de San Diego cuenta con muchos destinos atractivos para turistas y locales, entre ellos las siguientes 3 cascadas, que al estar ubicadas en una zona semiárida dependen de lluvias recientes, haciéndolas destinos perfectos para los meses húmedos de Diciembre y Enero. Puede que sean más pequeñas de las que se pueden encontrar hacia el norte del estado, pero eso no significa que sean menos espectaculares.
Cascada Los Peñasquitos
Es una de las gemas ocultas de San Diego, frecuentada por los locales. Se encuentra en el interior de Los Peñasquitos Canyon Preserve. Hay 2 estacionamientos, uno al norte y uno al sur. La cascada se encuentra justo a la mitad de ambos. Tendrás que caminar, o montar bicicleta, unos 4 kilómetros desde el que más te convenga.
Nosotros te recomendamos empezar desde el norte ya que en el camino también te encontrarás con una vieja casa de Adobe y una tumba icónicas así como riachuelos con pequeños muelles. El terreno en su mayor parte es plano, haciéndolo perfecto para ir acompañado de la familia y de tu perro (con su correa), al menos hasta llegar a la cascada, donde comienza a hacerse más angosto y rocoso.
Lo que no debe faltarte es un buen protector solar ya que el lugar es árido y no tiene árboles que den sombra durante la caminata.
Cascada Horsethief Canyon
Este lugar recibe su nombre porque en el pasado los ladrones de caballos solían parar aquí para descansar antes de seguir su viaje hacia la frontera con México. La caminata hacia la cascada y de regreso al estacionamiento es de 6 kilómetros en total. El terreno es mucho más disparejo que en Los Peñasquitos, pero tiene mucha más vegetación, por lo que no sentirás tan pesados los rayos del Sol. La cascada no se alcanza a ver desde el camino y es fácil perderte así que no te confíes y lleva un mapa para saber por dónde ir.
Aquí también puedes ir acompañado de tu perro (con su correa), pero las bicicletas están prohibidas.
Cascada Cedar Creek
Es parte del Bosque Nacional Cleveland. La caminata hacia esta cascada, de unos 10.6 kilómetros, es mucho más demandante, fácil solo para aquéllos con un poco más de experiencia y condición y se recomienda hacerla en los meses fríos porque en verano es común que los visitantes sufran golpes de calor.
Por lo anterior, también se requiere un permiso impreso con costo de $6 dólares, por cada grupo de hasta 5 personas, para visitarla (solicítalo aquí). Solo se emiten 75 permisos por día, así que es importante que planees con tiempo de anticipación y reserves tu fecha.
Las autoridades del lugar sugieren no llevar mascotas ya que el terreno es complicado y suelen lastimarse las patas por el calor del suelo, además de que la posibilidad de encontrar serpientes es alta.
Aunque suena complicado llegar, la cascada tiene una caída de 24.3 metros hacia un estanque conocido como “Devil’s Punchbowl”, que vale la pena completamente.