De acuerdo con el informe semanal de la Dirección General de Epidemiología (DGE), de la secretaría de Salud a nivel federal, el estado de Nuevo León se mantiene, hasta la semana 15 del año, con siete defunciones por influenza en la temporada, la más reciente, en la semana trece del año en curso.
Aunque, muestran los datos oficiales, a la semana 15 del año 2018 en la entidad no se tenía ningún deceso por esta causa.
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Las cifras de la autoridad indican, además, que en todos los campos posibles se tiene un alza considerable este año respecto al previo, algunas de ellas superior al 100 por ciento.
Por ejemplo, en estas 15 semanas del 2019, suman en la entidad 2 mil 567 casos de ETI/IRAG (Enfermedad Tipo Influenza/Infección Respiratoria Aguda Grave); la cual se ubica como la quinta cantidad más alta en México.
Mientras que en las primeras 15 semanas del año 2018, los números oficiales muestran que en Nuevo León hubo mil 321 casos de ETI/IRAG, es decir, un aumento este año del 94.32 por ciento.
En lo que respecta a los casos positivos a influenza, el alza es mayor, dado que a estas alturas del 2018, solo se tenían 76 casos, por 159 que se acumulan en este 2019, para un incremento del 109.21 por ciento.
Cabe destacar que en casos positivos a influenza, Nuevo León, con sus 159, ocupa el lugar 18 en el país en este rubro.
Y, en la cuestión porcentual de casos positivos a influenza, respecto a los casos de ETI/IRAG, el incremento es del 6.89 por ciento, al pasar de un 5.8 en el 2018, a un 6.2 en este año 2019.
Es preciso mencionar que el estado, con ese porcentaje de 6.2 se coloca en el sitio 31, de 32 entidades federativas, en cuanto al porcentaje de casos positivos a influenza respecto a casos ETI/IRAG, solo por debajo de Quintana Roo, que tiene un 4.4 por ciento en lo que va del año.
A nivel nacional, los casos de influenza pasaron de 3 mil 561 en la temporada anterior, a 6 mil 703 en esta, y las muertes por esta enfermedad se incrementaron de 152 a 767, siendo la segunda cifra más alta de decesos de 2010 a la fecha, solo atrás de las mil 107 que hubo en la temporada 2013-2014.
“Las defunciones se asocian a un retraso en el inicio del tratamiento antiviral (44.7%), una demanda tardía de atención médica (32.7%), ausencia de vacunación (92.6%), y la presencia de comorbilidades (32.7% hipertensión arterial, 31.9% obesidad y 31.2% diabetes mellitus)”, destaca el informe de la DGE.
En cuanto a las siete muertes en Nuevo León, en la semana 1 se registró la primera de ellas, una en la semana 4, una en la 8, tres en la 10 y la más reciente en la semana 13.