El Gran Telescopio Milimétrico Alfonso Serrano (GTM), ubicado en el volcán Sierra Negra, en el Pico de Orizaba, en Puebla, operado por el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), obtuvo nuevas imágenes que se traducen en evidencias del movimiento de los campos magnéticos en el borde del agujero negro de la galaxia M87.
Después de que en el año 2019, el GTM formó parte de la conformación del telescopio más grande del mundo a partir de la colaboración en el proyecto denominado Telescopio Horizonte de Eventos (EHT), que produjo la primera imagen de un agujero negro, en este 2021, los investigadores lograron una nueva perspectiva del objeto masivo en el centro de la galaxia M87: su imagen en luz polarizada.
David Hughes, director del GTM e investigador del Inaoe, destacó que los nuevos resultados de las investigaciones de la estructura del campo magnético, ayudarán a comprender la conexión física entre el agujero negro supermasivo giratorio en M87 y el denominado enorme y poderoso chorro, observado en otras longitudes de onda, que cruza la galaxia elíptica.
“La colaboración del Telescopio del Horizonte de Eventos (EHT), que produjo la primera imagen de un agujero negro, ha revelado hoy una nueva vista del objeto masivo en el centro de la galaxia M87: cómo se ve en luz polarizada. Se trata de la primera vez que los astrónomos han podido medir polarización, la firma de los campos magnéticos, tan cerca del borde de un agujero negro”, explicó el director del GTM.
De acuerdo con el Inaoe, los brillantes chorros de energía y materia que emergen del núcleo de M87 y se extienden al menos hasta cinco mil años luz de su centro son una de las características más misteriosas y enérgicas de la galaxia. La mayor parte de la materia que se encuentra cerca del borde de un agujero negro cae dentro. Sin embargo, algunas de las partículas circundantes escapan momentos antes de la captura y son expulsadas al espacio en forma de chorros.
Para los investigadores, las observaciones son clave para explicar la forma en la que la galaxia M87, ubicada a 55 millones de años luz de distancia, puede lanzar chorros de material muy energéticos desde su núcleo.
Monika Moscibrodzka, investigadora en la Universidad de Radboud, Países Bajos, quien trabaja en el análisis de las evidencias obtenidas en el GTM, explicó que los resultados revelan el comportamiento de los campos magnéticos alrededor de los agujeros negros.
“Estamos viendo una evidencia única para comprender cómo se comportan los campos magnéticos alrededor de los agujeros negros, y cómo la actividad en esta región tan compacta del espacio puede impulsar poderosos chorros que se extienden mucho más allá de la galaxia”, explicó.
Fue el pasado 10 de abril de 2019 cuando se publicó la primera imagen de un agujero negro, revelando una estructura brillante en forma de anillo con una región central oscura: la sombra del agujero negro. Desde entonces, los investigadores de diferentes institutos analizan los datos sobre el objeto supermasivo en el corazón de la galaxia M87, recopilados en 2017, y ya descubrieron que una fracción significativa de la luz alrededor del agujero negro M87 está polarizada.
AFM