Para la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la planificación familiar es un asunto de derechos humanos y también es pieza fundamental para el empoderamiento de las mujeres y reducción de la pobreza.
Esta hipótesis es soportada por la investigación que se realizó en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), que plantea que la edad, el nivel educativo y el estado civil de las mujeres incide en el grado de participación en el mercado laboral.
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“La reducción en el número de hijos permite a la mujer una mayor incorporación al mercado de trabajo, sin embargo, los roles preestablecidos mantienen al sector femenino como responsable de las labores domésticas, cumpliendo así una doble jornada laboral”, señala el estudio realizado por las investigadoras de la casa de estudios hidalguense, María Valeria Judith Montoya García y Elsa Ortiz Ávila.
De acuerdo con el estudio titulado Participación laboral de la mujer y su fecundidad en México, 2005-2015, efectuado por las investigadoras del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu), el número de hijos de la mujer sigue siendo importante para entender su participación laboral, pues la reducción de descendientes y el tiempo dedicado a sus cuidados, le permite mayor incorporación al mercado de trabajo.
“La disminución en los niveles de fecundidad se traduce en menos hijos, lo que ha liberado a las mujeres tiempo y trabajo”. En ese contexto, el estudio detectó que “las jefaturas femeninas van en aumento, al pasar del 16 al 28 por ciento entre los años 2005 y 2015, revelando una doble jornada laboral de las mujeres. Además, las tasas de participación laboral se modifican de acuerdo a la edad pues ellas alcanzan mayor participación entre los 30 y 45 años de edad, en tanto que aquellas que no tienen hijos presentan tasas de participación son mucho más altas”, refiere.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés) contribuye a ampliar el acceso a la planificación familiar en los países en vías de desarrollo a través de estrategias dirigidas a garantizar un suministro confiable de una amplia gama de anticonceptivos modernos, fortalecer los sistemas nacionales de salud y promover la igualdad de género.
UNFPA apoya los esfuerzos de los países para hacer valer el derecho de las personas, especialmente las mujeres, a planear una familia.
La investigación de la UAEH, que se presentó en el III Congreso Mexicano de Sociología organizado por el Colegio Mexicano de Sociología y el Área Académica de Demografía y Sociología de la UAEH, revela que “si las mujeres no tienen pareja, tienen tasas de participación más elevada al ser ellas las que solventan los gastos del hogar al mismo tiempo que son las responsables de las tareas domésticas y el cuidado de sus familiares dependientes”.
La también coordinadora de la Maestría en Estudios de Población de la UAEH, Valeria Montoya, mencionó que la educación es determinante para incorporarse al mercado laboral, pues entre más estudios tienen las mujeres, más probable es que se incorporen al mundo del trabajo, además de que los mayores niveles educativos retrasan la maternidad en el sector femenino.